JERUSALEN.- Un atacante suicida palestino irrumpió hoy en un restaurante al borde de una carretera en la aldea israelí de Mehola e hizo detonar una carga de explosivos que llevaba sobre el cuerpo. Dos israelíes murieron y por lo menos tres más resultaron heridos, informó la policía.
Los heridos fueron atendidos por paramédicos de ambulancias que se apresuraron al sitio en esta población en el extremo norte de Cisjordania, en el Valle del Jordán.
Yitzhak Miller, un residente de Mehol, dijo que los heridos fueron trasladados por helicóptero a la cercana ciudad israelí de Afula.
Hasta ahora, nadie se atribuyó la responsabilidad del atentado, pero en los tres meses de violencia reciente se han suscitado varios ataques perpetrados con víctimas mortales por parte de palestinos contra blancos israelíes.
Tropas israelíes revisaban el área y un helicóptero del ejército ayudaba en la búsqueda.
El jefe del servicio de ambulancias de la población Yossi Goren dijo que "un terrorista entró en el restaurante y se voló a sí mismo con una carga de explosivos".
Mehola está unos 70 kilómetros al noreste de Jerusalén, en un área aislada del valle del Jordán.
Los testigos dijeron a la policía que el atacante, un palestino, tenía puestos los explosivos sobre su cuerpo "El terrorista se voló a sí mismo con la carga de explosivos que llevaba encima", dijo el vocero de la policía Rafi Yaffe.
"Hay miembros tirados por el suelo, pero no podría decir si pertenecen a uno, dos o más cuerpos", dijo Miller a la radio israelí.
Por otra parte, en la Franja de Gaza, un palestino que trabajaba como obrero en un asentamiento judío murió, informó la radio Israel.
El ejército dijo que palestinos dispararon contra posiciones del ejército en Netzarim, y mataron al palestino, quien trabajaba en un invernadero. Los soldados repelieron el ataque, según fuentes militares.
En Jerusalén, fieles palestinos que se retiraban de la Ciudad Vieja amurallada en el día más importante de oración del mes santo musulmán de Ramadán, volvieron a enfrascarse en una batalla con piedras. Por lo menos un palestino resultó herido y otro fue arrestado.
Los funcionarios palestinos tomaron, en tanto, una actitud de espera con respecto a las conversaciones de paz en Washington, donde el Presidente estadounidense Bill Clinton presentó a ambas partes su propuesta de lineamientos para un tratado.
El líder palestino Yasser Arafat dijo a la prensa en la Franja de Gaza que "no hay un resultado final".
Cuando se le cuestionó si estaba próximo un pacto, respondió: "Así lo espero".
En Jerusalén, la policía y el ejército intensificaron las medidas de seguridad en el último día de Ramadán. Más de 3.000 policía y soldados patrullaron la zona oriental de Jerusalén, tradicionalmente árabe.
