París.- Cinco niños de once meses a doce años y tres adultos murieron anoche en la localidad de Essoyes (centro de Francia), al incendiarse la vivienda en la que dos familias celebraban la Nochebuena, informaron los bomberos.
Los ocho cadáveres recuperados por los bomberos fueron los de la pareja de propietarios de la vivienda y los de sus cinco hijos, de once meses, tres, nueve, diez y doce años, así como el de una mujer de la otra familia, cuyo marido e hijo de doce años pudieron escapar de las llamas, que consumieron el interior de la casa, un chalet individual, rápidamente.
Los bomberos señalaron que el origen del incendio "de una extrema violencia" fue "a priori accidental", y que se ha abierto una investigación para determinar las causas exactas.
También indicaron que en el momento del siniestro había una chimenea encendida.
Tanto los adultos como los niños murieron, según los primeros indicios, por asfixia, y sus cadáveres fueron encontrados en una misma sala de la planta baja de la vivienda, de 16 metros cuadrados.
El niño sobreviviente escapó del fuego saltando por una ventana del primer piso y se hizo un esguince, mientras que su padre salió del edificio por la puerta de entrada.
Ambos fueron trasladados al hospital de Troyes, la capital del departamento, a unos 60 kilómetros al norte de Essoyes.
Los servicios de socorro llegaron poco después de ser alertados por los vecinos, que hacia las 20.00 locales (19.00 GMT) vieron cómo salían llamas por las ventanas de la vivienda.
La Fiscalía ordenó que se practicara la autopsia a los cadáveres, y el prefecto (delegado del Gobierno) del departamento de Aube, Michel Pinauldt, se trasladó al lugar del siniestro.
