BUENOS AIRES.- La gobernante Unión Cívica Radical (UCR) respaldó hoy al presidente argentino, Fernando de la Rúa, en su decisión de proponer una reprogramación de la deuda pública y se mostró complacida con la declarada voluntad del jefe del Estado de cambiar el rumbo de sus políticas.
Las medidas, que incluyen nuevos planes de asistencia social y estímulos a la producción y el consuno, logró al parecer calmar los ánimos en la UCR, donde un amplio sector de la dirigencia había adoptado una actitud crítica frente a los siete ajustes económicos que impuso De la Rúa en menos de dos años de gestión.
Entre esos directivos que salieron a confrontar al Gobierno está el líder del partido, el ex presidente argentino Raúl Alfonsín, quien semanas atrás llegó a pedir en público la renuncia del ministro de Economía, Domingo Cavallo.
Hoy, en una declaración que lleva la firma de Alfonsín y de otras autoridades del partido, los radicales recordaron que plantearon el pasado 24 de octubre "la necesidad impostergable de un cambio de rumbo en las políticas económicas y sociales", a partir de un plan para la reprogramación de la deuda pública.
Los anuncios de De la Rúa "indican su propósito de provocar el cambio solicitado", señalaron.
"Es por ello que, tal como lo habíamos afirmado días pasados, hoy volvemos a señalar la importancia de acompañar al Gobierno en el cambio de rumbo económico y social que ha reclamado la sociedad en las elecciones legislativas del pasado 14 de octubre", cuando la Alianza que encabeza la UCR fue ampliamente
derrotada.
"Hay que comprender -añade el comunicado- que el desafío que enfrentamos los argentinos para salir de la crisis es enorme y requiere que todo el pueblo se muestre unido, más allá de las diferencias políticas partidarias".
Los radicales hicieron el llamado a la unidad "para derrotar definitivamente una etapa signada por el estancamiento económico, el elevado desempleo, la inseguridad personal, la destrucción de la clase media y la pauperización de los sectores laborales".
