JERUSALÉN.- El Primer Ministro israelí, Ariel Sharon, viaja hoy miércoles a EEUU, donde pedirá a su presidente, George W. Bush, que presione aun más al líder palestino, Yasser Arafat, y le planteará la amenaza que supone Irán para Israel.
Sharon, líder del partido de derechas Likud, emprenderá viaje esta tarde a Washington y mañana jueves se reunirá con Bush, que le invitó a efectuar esta visita oficial, la cuarta del primer ministro israelí desde que el presidente estadounidense juró su cargo, hace poco más de un año.
La reunión estará centrada en el actual enfrentamiento entre israelíes y palestinos que dura más de dieciséis meses, en el curso de los cuales murieron unas 1.100 personas, más de 900 de ellos palestinos.
El jefe del Gobierno de Israel tiene previsto decirle a Bush que hay que seguir aislando al presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasser Arafat, confinado por ese país, desde hace algo más de dos meses, en la ciudad cisjordana autónoma de Ramala.
Sharon insiste en que continúen las presiones locales, regionales e internacionales sobre Arafat, "a fin de que ponga fin al terrorismo".
En ese sentido se manifestó el Primer Ministro israelí en una conversación telefónica que mantuvo en la noche del martes con el presidente ruso, Vladimir Putin.
Además, Sharon informará a Bush de la reunión que celebró recientemente en Jerusalén con tres destacados dirigentes palestinos: el presidente del Parlamento, Ahmed Qurea (conocido como "Abu Alá"); Mahmud Abas, "número dos" de Arafat, y el asesor económico del presidente de la ANP, Mohamed Rashid.
Sharon tratará de convencer al Presidente estadounidense que "hay una auténtica dirección palestina que constituye una alternativa a Arafat", como dice ahora abiertamente el Gobierno israelí.
Por su parte, el presidente del Parlamento palestino decidió continuar su estancia en Washington, donde se quedará hasta después de la entrevista de Sharon y Bush, tras la cual aquel se volverá a reunir con gobernantes estadounidenses, según informó hoy la radio estatal israelí.
También le dirá Sharon a Bush que busca "las formas de poner fin al terrorismo, la violencia y la incitación, y de reanudar el proceso negociador", para el que elaboró un plan de tres fases, cuyo objetivo es alcanzar un acuerdo de no beligerancia a largo plazo que eventualmente ha de desembocar en un tratado definitivo.
Otro asunto destacado que planteará Sharon en la entrevista que celebre mañana jueves con Bush es el de lo que en Israel se califica de "peligro de Irán", que -según dijo ayer el comandante en jefe del Ejército israelí, el general Shaúl Mofaz- "afecta a la propia existencia" de su país.
El general Mofaz afirmó que su país "tiene otro tipo de capacidad" (en una posible alusión a la nuclear) para impedir el disparo de misiles por parte de Irán".
A su vez, Sharon dijo ayer a la prensa que "los ciudadanos de Israel deben saber que el Ejército y el Gobierno israelíes toman todas las medidas necesarias para defenderlos; tenemos que ser pacientes y calmados, y tener más confianza en nosotros mismos".
Una tercera cuestión que se tratará en la reunión de mañana se refiere al rearme de Irak, país árabe al que -según se informa- EE.UU. tiene previsto incluir, después de Afganistán, en la segunda fase del "ataque contra el terrorismo".
Se prevé que Sharon le solicitará a Bush que Estados Unidos le avise a Israel con tiempo suficiente antes de lanzar un ataque contra Irak, y se da por sentado que -como dice la prensa israelí- haya más que una coordinación política entre ambos países.