LUANDA.- Los jefes del Ejército angoleño y de los guerrilleros de la Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA) firmaron oficialmente este jueves un acuerdo de cese el fuego que pondrá fin a 27 años de guerra, comprobó la AFP.
El acuerdo fue firmado por el comandante militar de la UNITA, Abreu Karmorteiro, y el jefe del Estado mayor de las Fuerzas Armadas Angoleñas (FAA), Armando Da Cruz, en presencia del Presidente angoleño Eduardo dos Santos.
Unas 4.000 personas asistieron a esta ceremonia oficial que tuvo lugar en el Palacio de Congresos de Luanda.
Entre los invitados estuvieron presentes el subsecretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y asesor en Asuntos africanos, Ibrahim Gambari, los representantes de la "troika" (Estados Unidos, Portugal y Rusia) encargada de supervisar el protocolo de paz de Lusaka firmado en 1994, así como los jefes de Estado mayor de los ejércitos de países de Africa austral, vecinos de Angola.
Tras la firma, el Presidente Dos Santos saludó abrazando a los generales firmantes bajo los aplausos de la multitud.
La muerte el 22 de febrero del jefe histórico de la UNITA, Jonas Savimbi, a manos de soldados en la provincia de Moxico, considerado por el poder y la ONU como obstáculo principal al restablecimiento de la paz, precipitó los acontecimientos en Angola.
A menos de tres semanas de su muerte, el 15 de marzo, responsables del Ejército y de la UNITA se comprometieron a poner término a las hostilidades en todo el territorio y quince días más tarde lograron la redacción de un acuerdo sobre un alto el fuego definitivo que acaba de ser rubricado en forma oficial.
Angola, ex colonia portuguesa, estuvo lacerada por una guerra civil sin interrupciones desde su independencia, en 1975.
La guerra dejó un saldo de 500.000 muertos y unos cuatro millones de personas desplazadas que huían de los combates, devastando la economía de ese país rico en petróleo y diamantes.
Asimismo, el Parlamento angoleño aprobó el martes por unanimidad una amnistía para todos los combatientes de la UNITA.
La amnistía afecta a "todos los civiles y militares angoleños y extranjeros que cometieron crímenes contra la seguridad del Estado angoleño".
