EMOLTV

Alvaro Uribe encabeza las preferencias presidenciales en Colombia

El candidato disidente del Partido Liberal, Alvaro Uribe, un abogado de 49 años con una postura de línea dura frente a la guerrilla izquierdista, obtenía un 53,3% de los votos de un total de 8.868.999 votos sufragios escrutados, indicó un comunicado de prensa de la Registraduría Nacional a las 18.00 horas.

26 de Mayo de 2002 | 18:11 | Agencias
BOGOTA.- El candidato presidencial Alvaro Uribe, que ha prometido mano firme contra los rebeldes, sigue consolidando su ventaja en las elecciones de este domingo con un 53,3% cuando se han contabilizado 8.868.999 votos, equivalente a 75,9% del total de las mesas escrutadas.

En segundo lugar aparece rezagado el aspirante liberal Horacio Serpa con un 31,3%, en tanto que el tercer lugar se lo adjudica el izquierdista Luis Eduardo Garzón con 6,3% y el cuarto la independiente Noemí Sanín, con 5,7%.

Con este resultado preliminar, Uribe obtendría de forma de inmediata la presidencia de la República al obtener el 50% más uno de los votos necesarios para evitar una segunda vuelta el 16 de junio.

El ministro del Interior, Armando Estrada, dijo tras finalizar las elecciones a las 16.00 local (21.00 GMT) que "en 11 municipios del país no hubo elecciones y en otros no hubo resultados porque fueron destruidos todos los materiales de carácter electoral".

Unas 23.000 personas no pudieron sufragar por este motivo en los municipios comprometidos de los 1.097 que tiene Colombia. "El balance es positivo... donde no se pudieron efectuar elecciones fue por amedrentamientos de la guerrilla", agregó Estrada.

También se registraron algunos combates esporádicos, hostigamientos armados y bloqueos de rutas por parte de los insurgentes. Más 200.000 policías y soldados vigilaron el país durante la jornada electoral.

Uribe, un abogado de 49 años con estudios de posgrado en la Universidad de Harvard, ha seducido a los colombianos con su promesa de autoridad en una nación que vive un conflicto de 38 años, que deja un 3.500 muertos anuales.

Entre las principales propuestas del candidato del movimiento Primero Colombia se encuentran aumentar el número de soldados profesionales de 55.000 a 100.000, reclutar 100.000 policías más (el doble de lo actual) y crear una red de un millón de informantes que ayuden a las fuerzas armadas.

"En la Presidencia seré el primer soldado de la nación", ha dicho Uribe.

Aunque también ha sostenido que no descarta volver a negociar con las guerrillas, siempre y cuando los rebeldes decreten un cese del fuego inmediato, pongan fin a los secuestros y acepten una verificación internacional de los acuerdos.

En la agitada campaña electoral, Uribe fue blanco de dos atentados y dos fueron desarticulados. El más grave ocurrió en abril cuando una bomba explotó al paso de su caravana en la ciudad de Barranquilla. Aunque el candidato salió ileso, cuatro personas que pasaban por el lugar murieron por el ataque atribuido a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

El abanderado de Primero Colombia es un disidente del Partido Liberal -el mayor de la nación- que ha ejercido los cargos de senador, alcalde de Medellín y gobernador del departamento de Antioquia.

Su ascenso en las preferencias de los colombianos se produjo en la medida que se hundía el proceso de paz con las FARC en medio de una ola de violencia.

Uribe siempre rechazó las negociaciones por su carácter infructuoso.

Finalmente, el presidente Andrés Pastrana rompió los diálogos en febrero pasado. Desde entonces, se registra una violenta ofensiva rebelde.

A diferencia del candidato que lidera los escrutinios, Serpa prometió que no iba a lanzar al país a una "guerra total".

El veterano político de 59 años, que ha sido ministro, negociador de paz y procurador, denunció que los paramilitares estaban presionando al electorado para que votara por Uribe, pero la fiscalía no encontró pruebas de ello.

Estos comicios, en los que compitieron 11 candidatos, se realizaron en medio de una fuerte tensión, debido a las presiones contra los votantes que estarían efectuando grupos paramilitares y guerrilleros.

"Creo que estamos posiblemente ante uno de los procesos electorales más difíciles de la historia reciente de Colombia. Las FARC le han declarado la guerra al pueblo", dijo Pastrana, tras votar.

La Organización de Estados Americanos (OEA) había afirmado que en estos comicios se podía dar un mensaje a los grupos violentos de que sus propuestas no son aceptadas.

"La de hoy es una prueba de fuego, porque está seriamente amenazada la democracia. Los grupos armados han aumentado en número y en poderío bélico", dijo este domingo a la AP el jefe de la misión de la OEA, Santiago Murray.

Colombia vive un conflicto armado de casi cuatro décadas, que deja unos 3.500 muertos anuales.

Proceso electoral difícil

Los rebeldes y los paramilitares reciben millonarios ingresos del narcotráfico, por lo que el gobierno colombiano, con el apoyo de Estados Unidos, lanzó una estrategia antidrogas denominada "El Plan Colombia", a la que Washington aporta 1.000 millones de dólares, en equipo militar y entrenamiento.

Además de la ofensiva guerrillera, las votaciones fueron antecedidas por temores de ataques a los candidatos que culminaron sus campañas bajo estrictas medidas de seguridad.

Uribe, quien en abril salió ileso de un atentado con una bomba en la caribeña ciudad de Barranquilla, terminó haciendo una campaña virtual, a través de teleconferencias y por razones de seguridad no votó a primeras horas como estaba previsto.

"Este es posiblemente uno de los procesos electorales más difíciles de la historia reciente de Colombia", dijo Pastrana al abrir la votaciones en la histórica Plaza de Bolívar, en el centro de Bogotá.

"Las FARC le han declarado la guerra al pueblo colombiano, pero por eso hoy los colombianos (...) vamos a salir a decirles a los violentos que es a través de los votos y no de las balas como se logran los triunfos", declaró el Mandatario al pedir a los ciudadanos acudir masivamente a las urnas.

Más de 24 millones de colombianos están habilitados para votar y escoger entre 11 candidatos al nuevo presidente de esta nación exportadora de petróleo, café, carbón, flores y banano.

Siguiendo a Uribe en las encuestas aparece el candidato oficial del Partido Liberal, Horacio Serpa, quien por segunda vez aspira a la presidencia y promueve temas sociales como la lucha contra el desempleo y la pobreza.

En las horas previas a las elecciones, las FARC destruyeron puentes, derribaron torres de energía, robaron material electoral, asesinaron un alcalde y destruyeron con explosivos dos oficinas electorales en igual número de pueblos del noroccidental departamento de Antioquia.

Varias ciudades y pueblos de cinco de los 32 departamentos de este país de más de 40 millones de habitantes permanecen sin electricidad por el derribo de 12 torres de energía, pero esa situación no afectará las votaciones ni los escrutinios.

El ministro del Interior Armando Estrado, dijo que en cinco de los 1.097 pueblos y ciudades del país no se iniciaron las votaciones por robo de material electoral.

Pese a temores de los electores en las primeras cuatro horas de las votaciones se observaba alta afluencia de electores en los centros de votación de Bogotá, a donde personas de diferentes edades acudían con entusiasmo.

En un hecho sin precedente que destaca la guerra interna de este país participa como candidata a la presidencia Ingrid Betancourt, líder del independiente Partido Verde Oxígeno, secuestrada hace más de tres meses por las FARC.

El Partido Conservador de Pastrana no presentó candidato, por primera vez en los últimos 60 años, pero la agrupación apoya la candidatura de Uribe.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?