LIMA.- Una huelga de 24 horas que realizan hoy los pobladores del distrito de Aguas Calientes ha impedido el acceso de los turistas a las ruinas incas de Machu Picchu, cerca de la ciudad peruana de Cuzco.
Los habitantes de Aguas Calientes han tomado la medida de fuerza para exigir el reinicio de las obras de agua y desagüe en la zona y un mejor servicio del transporte ferroviario local, que administra el consorcio privado Perú Rail.
El presidente del Frente de Defensa de Aguas Calientes, Oscar Valencia, dijo a la prensa que los habitantes fueron "obligados" a asumir esta medida que afecta al turismo.
Valencia explicó que los pobladores que viajan en tren desde Machu Picchu a la zona de Ollantaytambo lo hacen "en condiciones infrahumanas", ya que el servicio local difiere enormemente del que se brinda a los turistas.
Añadió que el servicio de agua potable no ha mejorado desde hace varias décadas, lo que ocasiona enfermedades entre los niños de la localidad y que incluso los turistas son afectados por esa situación.
Ante la medida de fuerza, las autoridades decidieron suspender la salida de trenes y helicópteros hacia Machu Picchu, ya que los pobladores han bloqueado la línea férrea y la carretera entre la zona del puente Ruinas y el complejo arqueológico.
Los pobladores del distrito amenazaron, además, con realizar un paro indefinido e incluso tomar la ciudadela inca si en 48 horas las autoridades no atienden sus demandas, que incluyen la revisión del contrato con Perú Rail.
Macchu Picchu, considerada Patrimonio Histórico Cultural de la Humanidad, es uno de los mayores atractivos turísticos del Cuzco, la antigua capital del Imperio de los Incas que es visitada diariamente por viajeros de todo el mundo.
El servicio ferroviario hacia la ciudadela es utilizado diariamente por unos 1.500 turistas durante la "temporada alta", que va desde el mes de mayo hasta julio, mientras que el resto del año, es decir la "temporada baja", sirve para transportar a unas 850 personas al día.
