BUENOS AIRES.- El Presidente argentino Eduardo Duhalde aseguró hoy que no se puede poner freno al proceso electoral en el país, por lo cual ratificó el cronograma previsto y anticipó que el lunes firmará un nuevo decreto de convocatoria a comicios partidarios para dar respuesta a los reclamos de las agrupaciones.
"No podemos parar el proceso electoral porque la gente quiere votar", afirmó Duhalde durante su programa "Conversando con el Presidente" que se emite por Radio Nacional. "Haremos lo necesario para no postergar el proceso electoral", agregó.
En este sentido, informó que dio instrucciones al ministro del Interior, Jorge Matzkin, para que "contente el pedido de la Justicia", luego del fallo emitido ayer que suspendió los comicios abiertos partidarios.
El juez federal de la provincia de Salta Abel Cornejo, suspendió las elecciones internas previstas para el 24 de noviembre, en una medida cautelar que no alteró la fecha para los comicios presidenciales, que se realizarán el 30 de marzo de 2003.
Duhalde afirmó que no apelará la sentencia del magistrado, pero admitió que ésta representa "un problema, porque pidió prácticamente la anulación del proceso interno y de elecciones de marzo".
"Creemos que si apelamos a esa medida, tendríamos que ir a la Cámara, posiblemente a la Corte (Suprema de Justicia) y el resultado sería que no tendríamos elecciones en noviembre para poder ir al proceso electoral de marzo", advirtió.
El jefe del gabinete de ministros, Alfredo Atanasof, manifestó por su parte que el 30 de marzo de 2003 habrá elecciones presidenciales. "Más allá de las fechas, nosotros queremos que el 30 de marzo haya elecciones generales", afirmó.
Fuentes gubernamentales indicaron que en el nuevo decreto de convocatoria a internas se postergaría entre 15 y 20 días la fecha de los comicios partidarios para dar tiempo a la justicia electoral de informatizar los padrones, discriminando entre afiliados e independientes.
De esa manera, los comicios abiertos podrían celebrarse a mediados del mes de diciembre.
Con esta decisión, el Gobierno haría lugar al reclamo del sector del oficialista Partido Justicialista (PJ, peronista) allegado al ex Presidente y precandidato Carlos Menem y de la opositora Unión Cívica Radical (UCR) para que los afiliados a un partido político no puedan votar en la interna de otra fuerza.
La ley electoral original sancionada por el Congreso en el mes de junio, antes de que fuera modificada por los decretos de Duhalde, establecía que en las elecciones internas de un partido sólo podían votar sus afiliados y los independientes.
Los cuestionados decretos del Poder Ejecutivo que reglamentan las elecciones partidarias internas permiten en cambio al afiliado de cualquier fuerza política, votar en las internas de otro partido. Días atrás, Menem impugnó esas resoluciones de Duhalde ante la Justicia porque consideró "una trampa" que permitan votar en las elecciones internas del PJ a todos los ciudadanos.
El ex Mandatario consideró que de esa manera otras fuerzas, en especial la UCR, podrían entrometerse en la disputa peronista para impedir que él vuelva al poder por tercera vez, luego de las dos presidencias consecutivas que ejerció entre 1989 y 1999.
Mediante el nuevo sistema, en cada partido votarían sólo sus afiliados y los independientes.
Por otra parte, Duhalde pidió hoy a los partidos políticos que reclaman la caducidad de todos los mandatos electivos y la convocatoria a una Convención Constituyente para reformar la Constitución que lo hagan "después de que sean electas las nuevas autoridades".
"Tienen que entender que éste no es el mejor momento, lo único que van a lograr haciendo esos planteos es que la elección se postergue indefinidamente", advirtió el Mandatario, en respuesta a los reclamos de la candidata presidencial por Alternativa para una República de Iguales (ARI), Elisa Carrió, el diputado izquierdista Luis Zamora y un grupo de organizaciones sociales.
