NACIONES UNIDAS.- El ministro argentino de Relaciones Exteriores, Carlos Ruckauf, anunció hoy ante la tribuna de la Asamblea General de las Naciones Unidas que su país no puede pagar las cuotas de contribución a la ONU.
En su intervención ante el plenario de la 57 sesión de la Asamblea General, Ruckauf manifestó que Argentina "pasa por una grave crisis económica y se ve incapacitado de cumplir con las obligaciones contraídas con el organismo internacional".
Argentina debe a la ONU 42,3 millones de dólares como cuota de contribución para el presupuesto regular, las operaciones de paz y los tribunales internacionales.
La contribución que el Gobierno argentino debería pagar este año asciende a 22,9 millones de dólares, cantidad a la que, según el ministro, su Gobierno tampoco podrá hacer frente.
Sin embargo, Argentina está excluida de la lista de naciones miembros de la ONU que no pueden votar en la Asamblea General, bajo el artículo 16 de la Carta, por impago de las cuotas de contribución durante dos años.
"Estas dificultades han sido expuestas al Comité de Cuotas, que ha efectuado una recomendación y esperamos que sea adoptada por la Asamblea General apelando a la comprensión de los países amigos de Argentina", manifestó Ruckauf, quien añadió que su país está encaminado a salir de la crisis profunda que vive.
El ministro argentino vinculó la recuperación económica de su país a una eliminación efectiva de las barreras al comercio agrícola por parte de los países desarrollados.
"La eliminación de las barreras al comercio agrícola permitiría un crecimiento de un 1 por ciento más por año del Producto Interior Bruto (PIB) de Argentina", dijo Ruckauf.
"Es imperioso que se concreten las insinuaciones que indican un camino hacia el libre comercio de los productos agrícolas, que permita a los países en desarrollo dejar de clamar por ayudas circunstanciales que generan círculos viciosos", afirmó.
El ministro aseguró que estas ayudas "sólo engrosan abultadas e impagables deudas", y pidió que a los países pobres "se les permita sostener su crecimiento comerciando con sus productos".
"En otras palabras, preferimos comercio antes que ayuda", añadió.
Ruckauf explicó que el Gobierno trabaja en "una nueva política comercial que, como política de Estado integral, apuntará a dotar a la economía argentina de un perfil netamente exportador, de modo que las ventas al resto del mundo sean el generador de divisas".
"Sólo la generación de divisas genuinas derivadas del intercambio comercial posibilitará el desarrollo económico sostenido en el tiempo, al mismo tiempo de posibilitar el pago de las deudas contraídas", argumentó el jefe de la diplomacia argentina.
Ruckauf hizo mención especial a la situación de Karim, Zahira y Sharif, los hijos de la ciudadana argentina Gabriela Arias Uriburu, retenidos por su padre en Jordania.
"Reclamamos una vez más por el derecho de aquellos niños (...) al reencuentro estable y permanente de los niños con su progenitora", dijo el canciller, quien lamentó que los esfuerzos de su Gobierno no hayan encontrado respuesta en Aman.
Ruckauf reiteró también la reclamación de Argentina para "la recuperación del ejercicio pleno de la soberanía" sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur, "respetando los intereses de sus habitantes y el derecho internacional".
"La Argentina ratifica una vez más su plena disposición para reanudar las negociaciones bilaterales con el Reino Unido para resolver esta cuestión", subrayó.
Además, el ministro argentino dio la bienvenida al anuncio de Bagdad de readmitir a los inspectores de desarme, ya que, dijo, "son los inspectores de todos nosotros y no hay motivo para negarse si no se tiene nada que ocultar".
