LONDRES.- Una cajita de madera de caoba de la princesa Diana de Gales, desaparecida sin dejar rastros, amenaza a la monarquía británica.
El explosivo contenido de la caja, calificado por Diana en broma como "mis joyas de la corona", permaneció durante cinco años debajo del trono como una bomba de tiempo.
En ella había una cinta con las "Confesiones de George Smith". Lo que el ex ayudante de cámara dijo a la princesa en 1996 sobre la violación que sufrió tras los muros del palacio pone hoy a la monarquía "en peligro de muerte", según "The Mirror".
Diana, que solía comprometerse con los más necesitados, siempre tenía un oído atento a las preocupaciones de la servidumbre. La acusación de violación del veterano de la Guerra de Malvinas contra un estrecho colaborador del príncipe Carlos fue especialmente explosiva.
Para Diana, era además una herramienta en su juicio de divorcio. Aparentemente, Carlos le dijo en aquel entonces: "Le prestas demasiada atención a las habladurías en los pasillos".
Pero Carlos se equivocó con ese comentario. El acusado, del que aún no se conoce el nombre y que rechazó los cargos a través de sus abogados, sigue al servicio de Carlos.
Interrumpen juicio a mayordomo
Y mientras tanto, en toda Gran Bretaña nadie duda de que el miedo del heredero a una revelación de estos oscuros secretos lo llevó a interrumpir hace diez días el juicio contra el ex mayordomo de Diana, Paul Burrell.
El juicio por robo contra Burrell, de 44 años, fue suspendido después de que la reina recordara "repentinamente" una conversación con Burrell, en la que el sirviente le comunicó que tenía en su poder cientos de objetos de Diana.
Con la intervención sin precedentes de la soberana pudo evitarse una declaración de Burrell respecto de la cinta desaparecida. Pero los medios, y finalmente el mismo Smith, se ocuparon de que el secreto saliera a la luz.
La opinión pública reaccionó consternada. Según las encuestas, una gran mayoría de los británicos sospecha que Carlos -y la reina- quisieron evitar que el asunto se aclarara.
La acusación de ocultamiento y la denuncnia de una violación podrían tener "consecuencias catastróficas" para la monarquía, según el analista James Whitaker.
"Se burlan de la casa real. ¿Es que ya no hay nada sagrado?", se pregunta el "Daily Mirror" hoy. "La crisis realmente parece apropiada para minar el poder de nuestra jefa de Estado y así nuestro país".
Sólo "una transparencia total" podrían salvar todavía a la reina y al heredero, opina "The Times". El diario recordó que la monarquía hoy -al contrario que en épocas anteriores- en vez de tener poder ilimitado apenas es "tolerada".
"Si el pueblo se rebela contra el monarca, basta un referéndum para quitarlo del trono", advierte el diario.
Según Burrell, la misteriosa cajita de madera de caoba posiblemente está en manos de la familia de Diana. Y ésta, por su parte, se refugia en el silencio.
