BUENOS AIRES.— Bajo los gobiernos de centroizquierda que se sucedieron desde la década de los años noventa, Chile pudo reducir notablemente los índices de pobreza, "porque no creemos en la teoría del derrame de la riqueza" que proclama el neoliberalismo, dijo este sábado el presidente Ricardo Lagos.
La citada teoría sostiene que hay que crear y acumular riqueza, sin pretender distribuirla entre los sectores más pobres, ya que ello se producirá naturalmente una vez sobrepasado cierto límite.
El mandatario chileno, que llegó para asistir el domingo a la asunción del nuevo presidente argentino Néstor Kirchner, ofreció una rueda de prensa en la embajada de su país.
"Chile ha podido bajar los niveles de pobreza del 40 al 20% porque no creemos en la teoría del derrame, del chorreo. A lo mejor opera, pero en cien años, pero nuestras demandas sociales son del día", expresó Lagos.
El presidente chileno aclaró también que las políticas sociales de su gobierno se sustentan en programas económicos sólidos y responsables, que aseguran el superávit fiscal, bajo la supervisión de una autoridad monetaria independiente.
"Entonces, si uno quiere mejor igualdad en educación y mayores recursos donde hay más pobreza, eso no tiene nada que ver con el mercado", sostuvo Lagos.
La explicación de Lagos sobre los logros de la coalición que gobierna a su país, pareció una tácita respuesta afirmativa a una pregunta acerca de si la reciente elección del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, y la asunción el domingo del argentino Kirchner, no indicaban un vuelco hacia el centroizquierda en el cono sur latinoamerican.
El mandatario visitante dijo también que es partidario de un avance más rápido del Mercado Común del Sur (Mercosur) en el terreno de las definiciones políticas, ya que las convergencias en materia económica, especialmente arancelarias, serán mucho más lentas. Chile y Bolivia revistan como estados asociados en el Mercosur, cuyos miembros plenos son la Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
Lagos rehusó dar una fecha concreta para la culminación de las negociaciones comerciales entre Chile y los Estados Unidos. Informó que se está en una etapa administrativa de traducción, del castellano al inglés, de los documentos sucriptos, lo que concluiría en cuestión de semanas. Negó que la demora se deba a la posición que adoptó Chile en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, cuando rehusó apoyar la invasión norteamericana a Irak.
El Grupo de Río, que acaba de concluir una reunión en el Cuzco a la que asistió el presidente chileno, "se ha convertido en una instancia de cooperación y coordinación política entre los países latinoamericanos", según Lagos.
Agregó que en la reunión que concluyó en Perú "hubo un par de definiciones importantes. Se tomó nota de los acuerdos en Venezuela, en cuanto permiten dar una solución democrática en ese país", a partir del referendum a que se comprometieron las partes enfrentadas.
"Y en lo referente a la situación de Colombia, hubo una petición expresa a (el secretario general de la ONU) Kofi Annan, para que se involucre y solicite un cese del fuego a la guerrilla, a fin de poder iniciar efectivas negociaciones de paz", añadió.
Lagos resaltó la importancia de que la reunión de Cuzco haya ocurrido una semana antes del encuentro del G8 (Grupo de países más desarrollados) en Evian, Francia, en la que por primera vez participarán dos países latinoamericanos, México y Brasil, que integran el Grupo de Río.
