WASHINGTON.- La comisión investigadora sobre el accidente del Columbia (CAIB) descubrió un defecto del sistema de lanzamiento de los trasbordadores espaciales, que constituye un riesgo para la reanudación de los vuelos de tres trasbordadores de que aún dispone la NASA, explicaron este jueves miembros de la CAIB.
Los investigadores descubrieron un defecto en el sistema de estabilización entre el depósito exterior del trasbordador y sus impulsores de apoyo. Algunos pedazos de esos estabilizadores podrían golpear al trasbordador durante el lanzamiento, causando un daño potencialmente fatal a los astronautas, según miembros de la CAIB.
El sistema en cuestión está constituido por un receptáculo montado sobre el depósito central, que sirve para recoger los pedazos de pernos que fijan los impulsores de apoyo sobre ese depósito inmediatamente después de la miniexplosión que permite la separación de esos impulsores de apoyo, alrededor de dos minutos después del despegue.
Los pernos se partieron en dos por la explosión y cada pedazo pesa alrededor de 20 kg cuando cae en el receptáculo, que no es "tan sólido como quisiéramos", explicó el presidente de la CAIB, el almirante retirado Harold Gehman.
Ese defecto "es potencialmente catastrófico en el futuro", en el marco de una reanudación de los vuelos de los trasbordadores, estimó el general retirado John Barry, miembro de la CAIB. Esta cuestión constituye "un posible problema para reanudar los vuelos", agregó.
El riesgo que comporta este sistema de estabilización no está vinculado con el accidente del Columbia, precisaron miembros de la CAIB.
La comisión investigadora ya había demostrado que un pedazo de espuma aislante que golpeó al trasbordador Columbia durante el despegue fue lo que provocó una fisura en el borde delantero de su ala izquierda, a través de la cual se metió el aire caliente en el trasbordador durante su reingreso a la atmósfera.
El calor debilitó la estructura del Columbia y provocó su destrucción con siete astronautas a bordo el 1 de febrero.
