ESTOCOLMO.- La policía de Suecia busca entre el hampa de Estocolmo indicios que permitan identificar al asesino de la ministra de Relaciones Exteriores, Anna Lindh, aunque aún no ha individualizado a ningún sospechoso.
El portavoz de la policía, Mats Nylen, informó que las fuerzas de seguridad han recibido pistas valiosas del público, pero declinó ofrecer más detalles de la investigación. Tampoco ha terminado el análisis del arma homicida, un cuchillo, y la chaqueta militar que vestía el asesino.
Se espera que para este fin de semana esté listo el análisis de las huellas digitales que el asesino habría dejado en una escalera mecánica.
La policía se muestra segura de que el autor del atentado actuó solo en un arranque espontáneo, y de que se trata de un drogadicto mentalmente perturbado. Sin embargo, aún no se difundirá un retrato robot del sospechoso, para evitar influir en posibles testigos.
El investigador Leif Jennekvist señaló que las cámaras de vigilancia de los almacenes NK, donde Lindh fue apuñalada, no arrojaron imágenes útiles para la pesquisa. Sin embargo, la policía ha reducido la búsqueda a un círculo de sospechosos. Quince testigos ofrecieron datos sobre el aspecto del agresor inmediatamente después del ataque, apuntó.
Entre otros lugares, las pesquisas se centran en albergues para personas sin techo y escondrijos de criminales.
La policía también intensificó los registros a personas en la estación central de ferrocarriles de Estocolmo y en el parque municipal de la capital sueca. Asimismo, está examinando los datos clínicos de personas mentalmente enfermas y hombres violentos.
Lindh murió en la mañana del jueves a consecuencia de las heridas que había sufrido cuando fue apuñalada por un individuo en un centro comercial de Estocolmo en la noche del miércoles.
Versiones de prensa no confirmadas afirmaban que un hombre de 32 años era buscado por la policía, pero este sospechoso fue descartado, según Nielsen.
Mientras tanto, el jefe del servicio secreto sueco (Sapo), Kurt Malstrom, rechazó los pedidos de renuncia en su contra por la supuesta negligencia de permitir que Lindh saliera sin escolta en un ambiente político caldeado por el referéndum sobre el ingreso de Suecia en el euro, que se realizará este domingo.
Lindh era la principal promotora del "sí" sueco a la moneda común europea, contra la opinión de la mayoría de sus compatriotas.
Las repercusiones del asesinato de Lindh sobre el referéndum del próximo domingo siguen siendo inciertas, según se desprende de los resultados dispares de dos encuestas difundidos hoy.
Mientras tanto, el gobernante Partido Socialdemócrata de Suecia decidió retirar de las calles todos los afiches en los que Lindh, con un gesto sonriente, llama a sus compatriotas a aceptar la moneda común europea.
Más de 50.000 personas se reunieron hoy en el centro de Estocolmo para rendir homenaje a una de las políticas más populares del país. El Primer Ministro, Goran Persson, la elogió como "un ejemplo para muchas mujeres jóvenes" por su compromiso político, su incansable actividad profesional y su dedicación a la familia.