RÍO DE JANEIRO.- El ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Celso Amorim, acusó a Estados Unidos de hacer "amenazas" y ejercer una presión "muy destructiva" para sacar adelante su proyecto en las negociaciones del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
En declaraciones que publica hoy "Folha de Sao Paulo", Amorim dijo que el gobierno estadounidense no está convenciendo a los países del área, "sino haciendo amenazas".
"Y Todos sabemos el poder de fuego de Estados Unidos, en todos los sentidos", añadió.
Amorim hizo sus declaraciones poco después de que el jefe de la delegación estadounidense en las negociaciones del ALCA, Ross Wilson, afirmara el viernes que Brasil se encuentra "sin el apoyo que esperaba".
Wilson participó en la reunión preparatoria en Puerto España (Trinidad y Tobago) del VIII encuentro ministerial que se celebrará en Miami el 20 y el 21 de noviembre.
La cita, a la que comparecieron representantes de los 34 países que negocian el ALCA, terminó ayer con un evidente distanciamiento de los dos presidentes de las negociaciones, Brasil y EEUU.
Brasil ha propuesto un ALCA que excluya los servicios, las inversiones y las compras gubernamentales, y su prioridad es la negociación de un acceso más libre a los mercados.
Washington insiste, por su parte, en un acuerdo "ambicioso", que incluya esos temas y elimine de la discusión los subsidios concedidos a los productores rurales y la legislación contra la competencia desleal.
El gobierno estadounidense pretende negociarlos sólo en el seno de la Organización Mundial de Comercio (OMC), a pesar del atraso de la ronda de Doha por la falta de acuerdo en la reunión de septiembre pasado en Cancún.
Amorim se declaró defensor de un ALCA "sin camisa de fuerza, ni positiva, ni negativa".
"O sea, quien quiera adoptar reglas para inversiones, por más amplias que sean, que lo haga, pero quien no lo quiera debe tener libertad para no adoptarlas", señaló.
Sostuvo que prefiere creer menos en los documentos puestos en la mesa por la delegación estadounidense en Puerto España y más en las declaraciones del representante de Comercio Exterior de EEUU, Robert Zoellick.
Según Amorim, el alto cargo estadounidense admitió, en declaraciones a la prensa de su país, que podría haber un escalonamiento en la entrada en vigor de ciertos puntos del ALCA, como las reglas para inversiones.
Esta iniciativa continental, propiciada fundamentalmente por EEUU, debe entrar en vigor en 2005.