TARIJA.- Una multitudinaria movilización convocada en contra del referéndum vinculante sobre la exportación del gas planteado por el nuevo presidente de Bolivia, Carlos Mesa, tuvo lugar hoy en la sureña ciudad de Tarija.
"Nunca hemos visto una marcha con una participación tan masiva. El Comité Pro Intereses del departamento de Tarija por resolución de instituciones ha convocado a toda la ciudadanía y a organizaciones a participar de la marcha y la concentración en defensa del derecho de decidir sobre la utilización del gas como única fuente de recursos para la región", relató un periodista de radio Panamericana.
De acuerdo al reporte, distintas columnas de manifestantes se desplazaron desde diferentes puntos de la ciudad hacia la plaza principal de Tarija, donde se congregaron finalmente unas 150.000 personas.
"Se ha volcado todo el pueblo a la plaza principal. Estudiantes, trabajadores, comerciantes, empleados en salud, maestros, transportistas y campesinos que han venido de las provincias. En realidad ha quedado chica la plaza principal", agregó el periodista de Panamericana.
Mientras tanto, en el altiplano de La Paz, en la zona de Collana, una comisión del gobierno intentaba dialogar con campesinos del Movimiento Sin Tierra que tomaron una hacienda de familiares del ex Presidente de Bolivia Gonzalo Sánchez de Lozada.
El ministro de Desarrollo Sostenible, Jorge Cortés, invitó hoy a conversar a los campesinos, que ocuparon el lunes la propiedad, ubicada a 75 kilómetros de La Paz tras enfrentarse con efectivos de la Policía.
"Ya hubo un acercamiento para el diálogo y debo adelantar que todo acuerdo al que se llegue entre el sector y el gobierno se realizará en el marco estricto de la ley", dijo el funcionario.
A estos conflictos se sumaron las renuncias de seis de los nueve prefectos del país, quienes pusieron a disposición del nuevo jefe de Estado sus cargos. Mesa decidirá si los ratifica o no, a pesar de haber anunciado que en su equipo de colaboradores no habrá políticos.
El defensor del Pueblo, Iván Zegada, elegido recientemente, también presentó su renuncia. La dimisión de Zegada fue solicitada por diversas organizaciones de derechos humanos que reprocharon la ausencia del defensor en los momentos de crisis que enfrentó el país la semana pasada.
Zegada fue elegido en el Congreso con el apoyo político de partidos que conformaban la coalición del gobierno de Sánchez de Lozada, en un proceso antecedido de una campaña de desprestigio contra la figura de la ex defensora del pueblo Ana María Romero, quien se postuló a la reelección.
Los sindicatos de campesinos y dirigentes de los productores de coca decretaron el lunes un cese de las protestas y bloqueos que dejaron 80 muertos y centenares de heridos y llevaron a la renuncia de Sánchez de Lozada y su reemplazo por Mesa.