RAMALLA.- El Presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasser Arafat, expresó hoy que su vida es amenazada día y noche, y pidió a las organizaciones internacionales que intervengan en Kalkilya, "ciudad que Israel convirtió en una gran cárcel".
"Mi vida es amenazada día y noche", afirmó durante el discurso que pronunció ante el Consejo Legislativo palestino en Ramalla (Cisjordania), que fue convocado para brindarle su confianza al gobierno del nuevo premier Ahmed Qurea (Abu Ala).
"Mi vida no vale más que la de Fares Odeh", dijo Arafat, refiriéndose al niño palestino fotografiado cuando lanzaba piedras contra un vehículo blindado israelí, y que fue abatido en ese incidente.
El Mandatario palestino hizo además un llamado a los grupos humanitarios internacionales para que envíen con urgencia delegaciones a Kalkilya (Cisjiordania), "la ciudad que Israel transformó en una gran cárcel para los palestinos".
"Kalkilya está ahora rodeada de muros y alambrados", agregó Arafat.
El líder palestino está asediado desde hace más de 20 meses en su cuartel general por Israel, que lo considera el principal "obstáculo" para la paz.
En este punto, el Estado hebreo tiene el apoyo de Estados Unidos, patrocinador del plan de paz internacional para una solución del conflicto israelo-palestino conocido como la "hoja de ruta".
El pasado 11 de septiembre, en la estela de un mortífero atentado palestino, el gabinete de seguridad israelí tomó la decisión de principio de "deshacerse" de Arafat.
Algunos responsables israelíes, como el número dos del gobierno Ehud Olmert, no descartaron entonces la posibilidad de eliminar físicamente al anciano dirigente palestino.