NUEVA DELHI.- Al menos trece personas resultaron muertas entre la noche del martes y esta madrugada en el estado nororiental indio de Assam, en varios ataques de grupos de aborígenes a inmigrantes hindi hablantes, informó la agencia local PTI.
Las autoridades han responsabilizado al grupo independentista armado Frente Unido de Liberación de Assam (ULFA) de la mayoría estos ataques y el jefe del Gobierno regional, Tarun Gogoi, ha pedido la ayuda del Ejército indio para mantener el orden.
El ataque más sangriento tuvo lugar esta mañana, cuando un grupo de entre 10 y 15 personas entraron en la casa de un empresario hindi hablante en la ciudad de Dibrugarh, a unos 250 kilómetros de Guwahati, la capital del estado, y mataron a seis miembros de su familia, entre ellos tres niños.
Según la Policía, los autores de la matanza entraron con cuchillos y apuñalaron a la esposa, dos hijas, un hijo y dos sobrinos del empresario, que consiguió huir mientras los atacantes incendiaban la casa.
Otras cuatro personas resultaron muertas y siete más heridas anoche, cuando varios individuos con armas automáticas dispararon contra un grupo de camioneros procedentes del estado norteño indio de Bihar que veían un partido de cricket por televisión en un café de carretera en Dhubri, a unos 350 kilómetros de Guwahati.
En la región de Tinsukia, cercana a Guwahati, una persona de origen biharí resultó muerta al ser incendiada por supuestos rebeldes una embotelladora de bebidas alcohólicas y la Policía ha encontrado, desde ayer, los cuerpos sin vida de otros dos inmigrantes.
Antes de estos sucesos, el pasado domingo, un comerciante hindi hablante murió en un ataque con granadas llevado a cabo por supuestos rebeldes independentistas en la ciudad assamesa de Golakganj, lo que eleva al menos a 14 el total de víctimas mortales.
El ULFA, secundado por el resto de grupos independentistas de Assam, una región de mayoría de población tribal, con sus propias tradiciones religiosas y culturales y con el assamés como lengua, exigió la semana pasada a todos los hindi hablantes que abandonaran "inmediatamente" el estado y amenazó con atacarles.
Estas amenazas se produjeron después de varios incidentes ocurridos los días 11 y 12 de noviembre, en los que primero un grupo de assameses atacaron a varias personas, procedentes del estado norteño indio de Bihar, que buscaban empleo en Assam.
Horas después, en Bihar, uno de los estados más pobres de la India, fueron atacados varios trenes en los que viajaban emigrantes assameses y al menos medio centenar de ellos resultaron heridos.
En diversos lugares del estado, según una fuente del Gobierno local, se han producido ataques e incendios de viviendas de inmigrantes durante la pasada noche, por lo que las autoridades mantienen el estado de alerta máxima declarado la semana pasada.
Assam es uno de los siete estados del noreste indio donde la mayoría de la población pertenece a grupos tribales y en los que una veintena de grupos armados luchan desde hace décadas por la independencia y la defensa de los derechos de los aborígenes, un levantamiento que ha causado centenares de muertes.
Estas organizaciones acusan al Gobierno central indio de explotar sus recursos naturales, petroleros y mineros y de promover la llegada de inmigrantes que, en su opinión, desplazan a la población local.