NUEVA YORK.- El Secretario General de Naciones Unidas, Kofi Annan, dijo este viernes que el controvertido muro de seguridad que Israel construye en Cisjordania es un retroceso al proceso de paz y que está dañando seriamente al pueblo palestino.
En un reporte de 12 páginas emitido un día después de que Israel anunció que acelerará la construcción del polémico muro, Annan dijo que reconocía el "derecho y la responsabilidad" de Israel de proteger a su pueblo.
"Sin embargo, esa responsabilidad no debería ser cumplida de una manera que está en contradicción con las leyes internacionales", sentenció, al tiempo que señaló que su construcción era un golpe a las esperanzas para el plan de paz con dos Estados impulsado por las Naciones Unidas.
"Cuando cada parte debería estar haciendo gestos de buena fe para construir la confianza, la construcción de la barrera en Cisjordania (...) no pude ser vista de otra manera que como un acto profundamente contraproducente", dijo.
El gabinete israelí aprobó el año pasado el controvertido muro, que los palestinos consideran como un intento para predeterminar las fronteras de cualquier Estado palestino independiente que obtengan en el futuro.
Los palestinos afirman además que el muro los despoja de tierras fértiles vitales para su deteriorada economía, una declaración que es respaldada por Annan en su reporte.
"Las secciones terminadas de la barrera han tenido un serio impacto sobre la agricultura en la que es considerada el ’granero’ de Cisjordania", dijo Annan.
Añadió que los puntos de chequeo que permiten a los palestinos acceso a las tierras que ya han sido cortadas por el muro están frecuentemente cerradas, aislándolos de las granjas, hospitales, clínicas, escuelas y servicios esenciales.
"Esto genera preocupación sobre las violaciones de los derechos de los palestinos al trabajo, la salud, la educación y un adecuado nivel de vida", dijo Annan.
El secretario afirmó que cuando el muro esté completo penetrará unos 22 kilómetros dentro de Cisjordania y aislará a unos 400.000 palestinos.
El reporte de Annan fue ordenado el mes pasado por la Asamblea General de la ONU, que emitió una resolución condenando la construcción del muro y llamó a Israel a detener la construcción inmediatamente.
Pero el primer ministro de Israel, Ariel Sharon, prometió el martes trabajar más rápidamente para terminar la construcción a pesar de la feroz oposición mundial, incluyendo a su mayor y más cercano aliado, Estados Unidos.