NUEVA YORK.- La organización de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW) acusó este martes al ejército de Estados Unidos de infringir las leyes de guerra, al demoler las casas de antiguos responsables del régimen iraquí y de sospechosos de insurgencia.
Según la organización, al menos cuatro casas han sido destruidas en los dos últimos meses con el fin de "castigar a las familias de los sospechosos para obligarles a cooperar".
La destrucción de bienes de civiles con fines vengativos o de disuasión es una acción prohibida por las Convenciones de Ginebra de 1949, por ello HRW escribió al secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, para pedirle que "se asegure de que los actos de las fuerzas estadounidenses en Irak se ajustan a leyes de guerra".
Asimismo, la asociación expresó su preocupación por el arresto de personas inocentes próximas a responsables del antiguo régimen.
