BUENOS AIRES.- La justicia argentina encausó hoy al ex secretario de Inteligencia de Estado Fernando de Santibañes, a dos ex senadores y a un ex alto empleado legislativo arrepentido, involucrados en el presunto pago de sobornos en el Senado, informaron fuentes judiciales.
Las dádivas fueron pagadas para la aprobación de una ley de reforma laboral en el gobierno de Fernando de la Rúa (1999-2001.
El juez federal Rodolfo Canicoba Corral encausó por presunto cohecho al empresario Santibañes -amigo personal de De la Rúa-, a los ex senadores, el radical José Genoud (entonces oficialismo) y el peronista Emilio Cantarero (en1tonces oposición).
También inició proceso contra el arrepentido ex secretario parlamentario Mario Pontaquarto, quien en diciembre pasado confesó que fue el encargado de repartir 5 millones de pesos (entonces igual en dólares) que había ido a recoger a la Secretaría de Inteligencia de Estado (SIDE) para distribuir entre senadores peronistas y radicales.
El juez Canicoba Corral además trabó embargos de hasta 10 millones de pesos (3,4 millones de dólares) a cada uno de los involucrados.
Pontaquarto reavivó la investigación en diciembre de 2003, al revelar haber sido parte de la maniobra, por la que el gobierno de De la Rúa habría comprado votos de la oposición en el Senado para la aprobación en abril de 2000 de la norma de flexibilización laboral, que le reclamaba el FMI.
En declaraciones a la prensa tras dictar los procesos, el magistrado dijo que de momento no tiene previsto citar a De la Rúa, pero indicó que está investigando "si ha tenido la participación que alguna versión le está adjudicando".
Según la resolución judicial, De Santibañes quedó bajo proceso por ser presunto autor del delito de cohecho activo, es decir, quien "da la dávida", mientras que Pontaquarto como presunto "partícipe necesario" del delito.
En declaraciones a radio Rivadavia, De la Rúa lamentó el encausamiento de su ex jefe de inteligencia y amigo personal y admitió que la situación "también afecta a mi gobierno porque trae sospechas sobre mi gestión".
Insistió sobre una "enorme presión que ha ejercido el gobierno (de Néstor Kirchner) desde la jefatura de Gabinete (cuyo titular es Alberto Fernández) y la prensa para crear un clima de sospecha sobre" él.
El escándalo durante su gobierno provocó la renuncia del entonces vicepresidente Carlos 'Chacho' Álvarez y el inicio de una crisis que concluyó con la dimisión de De la Rúa, el 20 de diciembre de 2001, en medio de una revuelta popular que dejó 30 muertos.
