244 muertos y más de 200 heridos ha dejado esta peregrinación anual.
MENA, Arabia Saudita.- Al menos 244 peregrinos musulmanes murieron aplastados el domingo en Arabia Saudita y otros 244 resultaron heridos en medio de una multitud de personas, en el clímax de la peregrinación anual "Haj", que en otros años ya ha sido escenario de mortales estampidas humanas.
"Al menos 244 peregrinos murieron en Jamarat y otros 244 están heridos", dijo a la prensa Iyad bin Amin Madani, ministro de Asuntos Religiosos, sin detallar las nacionalidades de las víctimas.
Alrededor de dos millones de peregrinos habían acudido al Puente Jamarat, cerca de la mezquita de Mena, vecina a la ciudad de La Meca, para arrojar piedras contra un pilar que representa al demonio.
El funcionario dijo que las autoridades sanitarias y de seguridad habían iniciado las operaciones de rescate y estaban controlando a la gente para evitar otros accidentes.
El año pasado, 14 personas murieron aplastadas cuando una multitud acudió al área para realizar el ritual.
En 2001, al menos 35 personas murieron en una estampida humana en el puente.
Apretujados entre los peregrinos que han pasado allí la noche, otros creyentes rezan y se unen en el hipnótico canto en árabe: "Oh Dios, estoy en tu presencia otra vez, no hay presencia como la tuya, para ti es la alabanza, el poder y el dominio, no hay nada semejante a ti".
Cerca de dos millones de peregrinos, incluido 1,45 millones provenientes del extranjero, acuden a realizar la ’Haj’, una obligación para todo musulmán capacitado físicamente al menos una vez en la vida.
Vendedores en los caminos muestran todo tipo de mercancías, desde paraguas para evitar el sol hasta alfombrillas y cuentas.
Hay hombres que se ofrecen para fotografiar a grupos enteros de peregrinos por 10 dólares cada foto, y algunos adolescentes muy emprendedores ofrecen paseos en camello a tres dólares.
Arabia Saudita insiste en que la ’Haj’, una de las mayores manifestaciones de fe y unidad en el mundo actual, debería ser sólo un asunto religioso.
"El Islam es una religión de paz y tolerancia", dijo el sábado el ministro de Información y Cultura, Fouad bin Abdul-Salam bin Mohammad Fasiri.
Añadió que la fe musulmana había sido retratada de forma negativa desde los ataques del 11 de septiembre del 2001.
