BAGDAD.- Tres policías iraquíes resultaron muertos en un ataque perpetrado por desconocidos en la ciudad santa chiíta de Kerbala, a 115 kilómetros al suroeste de la capital, informaron hoy fuentes de seguridad locales.
El blanco de la emboscada era el jefe de la Policía de Kerbala, Abas al Hoseini, que se encontraba en uno de los coches del convoy atacado.
Según testigos oculares, el jefe policial resultó ileso del ataque.
Una decena de personas murieron y más de cuarenta resultaron heridas el último sábado por la explosión de un coche bomba junto a un comisaría en la ciudad de Mosul, a unos 300 kilómetros al norte de Bagdad.
Las comisarías policiales y sus agentes son uno de los objetivos más atacados por los insurgentes iraquíes, que consideran a la nueva policía como una fuerza "colaboracionista" con las tropas de ocupación.
Por otra parte, los insurgentes iraquíes dispararon en la pasada madrugada dos cohetes contra el Aeropuerto Internacional de Bagdad ayer sin causar víctimas ni daños materiales de importancia, según informaron los militares estadounidenses.
El Ejército norteamericano utiliza ese aeródromo como base de operaciones desde la toma de Bagdad el pasado 9 de abril.
El portavoz del mando estadounidense no facilitó datos sobre las circunstancias o la hora del ataque.
Dijo sin embargo que los proyectiles habían sido lanzados desde una zona populosa de la capital.
En ocasiones anteriores, los rebeldes han disparado desde la Abu Gharib, una localidad que ya se ha convertido en una barriada del suroeste de Bagdad.
A finales del pasado diciembre, la resistencia iraquí logró alcanzar un avión de carga de la compañía de transporte urgente DHL justo cuando procedía al despegue.
El aparato regresó al aeropuerto en llamas, pero no hubo que lamentar víctimas.
A raíz de aquel incidente se suspendieron durante una semana los vuelos civiles desde el aeropuerto de Bagdad.
Sólo dos compañías chárter tienen autorización para utilizar el aeropuerto de Bagdad para realizar vuelos de carácter humanitario. El aeródromo no está abierto aún al tráfico comercial de pasajeros.
Fuentes de la Administración Provisional de la Coalición han expresado su deseo de reabrir el citado aeródromo para finales de junio.
Las tropas norteamericanas se trasladarían entonces a la Base Anaconda. Este campamento, situado en Balad, a 100 kilómetros al norte de Bagdad, es la mayor concentración militar norteamericana en Irak, con 17.000 soldados.
