ISLAMABAD.- Un ataque con disparos contra una procesión chiíta en la ciudad paquistaní de Quetta causó hoy la muerte de al menos 37 personas y dejó heridas a otras 38.
El balance de ataque aumentó considerablemente porque numerosas víctimas fueron llevadas inicialmente hacia mezquitas o domicilios particulares y no habían sido incluidas en el recuento, se indicó en un hospital.
Desconocidos dispararon contra los religiosos desde distintas posiciones mientras avanzaban por una calle central de la ciudad, informó el canal de televisión local Geo. Testigos dijeron que los policías que acompañaban la procesión intentaron responder al fuego, pero no pudieron divisar a los atacantes.
La marcha de musulmanes chiítas marcaba la fiesta de Ashura, en la que se recuerda el martirio de su líder espiritual, el imán Hussein, hace más de 1.300 años.
El ataque causó además graves disturbios en Quetta, en el suroeste de Pakistán. Varias personas saquearon e incendiaron comercios. Las autoridades locales dispusieron un toque de queda y llamaron refuerzos para controlar la situación.
El sábado, un atacante suicida se voló por los aires en una mezquita chiíta en la ciudad paquistaní de Rawalpindi, hiriendo a tres personas.
En julio del año pasado, presuntos extremistas atacaron una mezquita chiíta de Quetta matando a más de 50 fieles. Fue la peor agresión contra la minoría chiíta en la capital de la provincia de Baluchistán.
El diez por ciento de los 140 millones de musulmanes paquistaníes pertenece a la corriente chiíta. El restante 90 por ciento responde a la minoría sunnita.
