ROMA.- El Vaticano hizo público hoy un nuevo documento para los cerca de 4.500 obispos del mundo en el que les pide adoptar medidas más duras frente a los escándalos al interior la Iglesia Católica.
En casos de comportamientos reñidos con la moral por parte de sacerdotes, el obispo en cuestión debe amonestarlo o reemplazarlo. Si estas medidas no fueran suficientes, los religiosos implicados deben perder sus cargos y debe abrirse contra ellos un procedimiento disciplinario, señala el documento, de unas 300 páginas.
Se considera que estas estrictas instrucciones son consecuencia de los numerosos escándalos por abusos sexuales contra menores perpetrados por sacerdotes, que han afectado sobre todo a la Iglesia Católica en Estados Unidos.
En este texto se exhorta además a los prelados a vivir en la pobreza, a ser castos y respetar el celibato de manera ejemplar.
Los obispos, según el Vaticano, deben pedir a los sacerdotes que sean "discretos y recatados" en su relación con las mujeres. "Una naturalidad mal entendida en estas relaciones puede degenerar en un vínculo sentimental", apunta el documento, que hasta ahora sólo se ha publicado en italiano pero que pronto será traducido a otros idiomas.