RAMALÁ.- Tropas del Ejército israelí tomaron hoy lunes dos viviendas en el campo de refugiados palestino de Tulkarem, en el norte de Cisjordania, que convirtieron en puestos de vigilancia, informaron fuentes locales.
Se trata de las casas de Abdalá al Sharkaui y de miembros de la familia de Al Nayi, en el campo de refugiados de Tulkarem en el que viven más de 16.000 habitantes.
Fuentes de las fuerzas palestinas de seguridad en esa localidad dijeron a EFE que ’’el Ejército israelí entra y sale de Tulkarem cuando quiere, tendrán un objetivo específico y en cuanto lo cumplan se marcharán’’.
Asimismo, alrededor de quince vehículos todoterreno del Ejército irrumpieron en el campo de refugiados de Balata, de la ciudad de Naplusa.
Los vehículos del Ejército entraron en la calle del mercado y en el barrio de Al Shuka, de Balata, que con más de 20.000 residentes es el campo de refugiados más populoso de Cisjordania.
Esta madrugada cuatro palestinos fueron detenidos en la aldea de Zauata, al norte de Naplusa, otros tres en el campo de refugiados de Aida, en el distrito de Belén, y dos en el pueblo de Kufar Zulz, cerca de la ciudad de Kalkilia.
Igualmente, dos hermanas de 17 y 29 años fueron arrestadas en la franja de Gaza, al este de la localidad de Karara.
El Ejército israelí cerró esta mañana el cruce de Erez/Bait Hanun, entre Israel y Gaza, por donde miles de trabajadores palestinos cruzan a diario para acudir a sus puestos de trabajo en Israel.
Se trata de una medida tomada tras el doble ataque suicida de anoche en el que murieron once israelíes en el puerto de Ashdod.
Los ejecutores del ataque, del que se responsabilizó el Movimiento de la Resistencia Islámica (HAMAS) y el movimiento oficialista de Al Fatah, eran dos jóvenes del campo de refugiados de Yabalia, en el norte Gaza.
Según las fuentes, la zona industrial de Erez, dentro de esa franja territorial y donde también trabajan miles de palestinos residentes en ese territorio, continúa abierta.