BASE DE LA FUERZA AÉREA DE HANSCOM/MANAGUA.- El soldado nicaragüense Camilo Mejía Castillo, hijo del conocido cantautor Carlos Mejía Godoy y que desertó de las tropas de Estados Unidos en Irak, se entregó hoy a las autoridades norteamericanas para enfrentar una corte marcial.
El militar de 28 años abandonó Irak en octubre pasado y permaneció clandestino en Estados Unidos hasta el domingo, cuando junto a familiares viajó de Miami a Boston para entregarse en una base militar de esa ciudad, reveló en Managua el matutino local "El Nuevo Diario".
"Aquí estoy señores, no soy ningún delincuente, sólo un objetor de conciencia", afirmó el joven soldado, a punto de graduarse de psicólogo en la Universidad de Miami, donde reside, tras reiterar que desertó de Irak porque considera que esa guerra es "injusta e inmoral".
Según informaron familiares en Managua, Mejía Castillo se reunió con los suyos el domingo en la Abadía de la Paz, en Boston, donde se ofició una misa en presencia de miembros de las organizaciones pacifistas "Veteranos por la Paz" y "Familias Militares Hablan".
Mejía Castillo, acompañado de su abogado, se presentó hoy ante las puertas de la Base de la Fuerza Aérea Hanscom y de inmediato fue introducido allí por dos policías militares.
"Le digo no a la guerra. He escogido el camino de la paz", dijo Mejía Castillo en una rueda de prensa. "Fui a Irak para ser un instrumento de la violencia, pero ahora decidí convertirme en un instrumento de la paz", declaró.
El cantante Carlos Mejía Godoy, quien viajó de Managua a Boston, solidarizó con la decisión de su hijo, que podría enfrentar la cárcel después de que las autoridades lo declararon fugitivo.
"Nuestra mejor defensa es lo que siente este muchacho, es sincero, valeroso. Si el gobierno y el Ejército de Estados Unidos son justos, deberán dejarlo libre", afirmó su abogado, Luis Font, especialista en códigos militares y veterano objetor de conciencia de la guerra de Vietnam.
"No hablamos de un chico que se negó a ir (a la guerra). El estuvo allá, vivió el horror y no quiso volver. Hacerlo iba contra su conciencia", añadió el jurista.
Se cree que Mejía Castillo es el primer soldado destinado a Irak que desertó. Regresó a Estados Unidos en octubre con un permiso especial y no se presentó para su regreso.