PRISTINA.- La misión de Naciones Unidas en Kosovo (UNMIK) presentó hoy su plan para la implementación de estándares democráticos en la provincia serbia, como condición previa a las negociaciones sobre el status definitivo de la conflictiva región.
El jefe de la UNMIK, Harri Holkeri, señaló en Pristina que se trata de un "plan detallado que define claramente las actividades y políticas para conseguir estos estándares", cuyo contenido concreto se conocerá en el momento de la implementación.
El documento de 125 páginas prevé para Kosovo "instituciones representativas y democráticas y la aplicación efectiva de la ley, donde las personas desplazadas son libres para retornar sin obstáculos y donde todos, sin importar su origen étnico, pueden ir seguros a trabajar", dijo Holkeri.
Kosovo fue nuevamente hace dos semanas escenario de graves enfrentamientos étnicos, que dejaron 28 muertos y cientos de heridos.
Aunque la minoría serbia de Kosovo no participó en la elaboración del plan, éste es válido para toda la población, advirtió.
La mayoría albanesa de Kosovo quiere la independencia, pero Serbia insiste en retener la soberanía de la provincia. Además de estar preocupado por la seguridad de la minoría serbia -cifras oficiales señalan que más de 1.000 serbios fueron asesinados y 200.000 huyeron de Kosovo desde 1999- el gobierno de Belgrado considera que la provincia, con sus iglesias y monasterios medievales, es la cuna de la espiritualidad nacional.
