QUITO.— Los presos de una cárcel de Quito permitieron este jueves la salida de 150 rehenes que mantenían en su poder desde el domingo, cuando estalló un amotinamiento en varias prisiones del país.
En la Cárcel 2 de Quito, hoy jueves un grupo de reclusos mostró dos tanques de gas y amenazó con hacerlos explotar.
Los presos reclaman, además de las rebajas de sus condenas, soluciones al hacinamiento en las cárceles.
Al problema con los internos se ha unido un paro de trabajadores de las prisiones, tanto administrativos como de seguridad.
Desde hace casi tres semanas estos se mantienen en un paro de actividades reclamando pago de salarios y recursos económicos para las prisiones.
Las personas liberadas el jueves, retenidas durante la visita dominical a la cárcel, fueron saliendo poco a poco desde la prisión, ubicada en medio de una barriada del centro de Quito.
Los presos accedieron a liberarlos tras una mediación de la Primera Dama Ximena Bohórquez, informaron medios de prensa. Ella no estuvo disponible para comentarios.
Otras 130 personas continuaban retenidas en la cárcel de mujeres, también en la capital.
En la Cárcel 3, Washington Grueso, representante de los presos, aseguró a la prensa que la protesta estaba a punto de concluir, puesto que los internos consideraban ponerle fin en consideración a la Semana Santa.
"Esta es una semana sagrada, y voy a conversar con los otros compañeros de otras cárceles para que la protesta termine", dijo Grueso a periodistas rodeado de algunos reos que blandían cuchillos a través de las rejas.
En esa prisión, en la madrugada del jueves, un detenido fue asesinado y otros tres resultaron heridos a cuchilladas en una riña por venganzas, según dijeron medios de prensa.
En la cárcel de mujeres, las presas se mostraban reticentes a liberar a los retenidos, entre ellos tres periodistas y tres camarógrafos, ignorando el pedido de la Primera Dama, que también acudió a ese presidio.
"No queremos que vengan solo con su presencia y las manos en sus bolsillos, queremos respuestas a nuestras claras a nuestras demandas", dijo a la prensa la dirigente de las reclusas, Mercedes Torres.
Los internos mantienen desde el domingo el control en las cárceles de Quito, y en Guayaquil, la segunda ciudad del país, mientras que Cuenca, la tercera ciudad, y en Ibarra, otra urbe importante, los reos lanzan gritos y consignas hacia el exterior.
El ministro de Gobierno, Raúl Baca, en canal 8 expresó que "el problema ya no es económico, porque lo que piden los reclusos es el cambio de las leyes vigentes y eso lo que tiene que tratar el Congreso".
El periodista de canal 10 de televisión, Daniel Montalvo, retenido en la cárcel de mujeres, dijo a la AP utilizando un teléfono celular, que allí "el ambiente está completamente calmado, aunque hay divergencias entre las presas por las condiciones" de un acuerdo con las autoridades.
