BUENOS AIRES.— La Corte Suprema abrió la posibilidad de excarcelación al ex almirante Emilio Massera, integrante de la junta militar que gobernó el país de 1976 a 1983, juzgado por robo de bebés.
El máximo tribunal, con cinco votos a favor y dos en contra, revocó el jueves un fallo de la Cámara del Crimen que rechazaba un pedido de excarcelación solicitado por el ex marino, de 78 años, y ordenó que el expediente regrese a la justicia de primera instancia para que pronuncie un nuevo fallo.
Sin embargo, en caso de que finalmente se le otorgue la libertad, Massera seguirá detenido por otras causas de violaciones a los derechos humanos.
Massera, que desde hace más de un año se encuentra internado en el Hospital Naval afectado por un derrame cerebral, está acusado por apoderarse y cambiar de identidad a niños nacidos en los campos de detención que funcionaron durante la dictadura.
Allí, las detenidas embarazadas daban a luz y se les quitaban sus hijos para entregarlos a otras familias, en algunos casos de miembros de las Fuerzas Armadas.
Massera, que había sido indultado a principios de 1990, luego quedó detenido en 1998 por el robo de bebés, delito que no estaba contemplado por los indultos ni las leyes de perdón que favorecieron a los militares.
Debido a su edad, el ex marino fue favorecido con el arresto domiciliario. Pero a fines de 2002 fue internado a causa de un derrame cerebral.
Su defensa había solicitado la libertad del ex militar con el argumento de que la prisión preventiva había excedido los dos años y que pactos internacionales sobre derechos humanos establecen que ese es el tiempo máximo para que un detenido esté en prisión sin sentencia.
Si bien la Corte Suprema no dispuso su libertad, ordenó a las instancias inferiores rever el caso.
"La extrema gravedad de los hechos que constituyen el objeto de este proceso...no puede constituir el fundamento para desvirtuar la naturaleza de las medidas cautelares a riesgo de poner en tela de juicio la seriedad de la administración de justicia", sostuvo el tribunal en su fallo.
Tras conocer la medida, la Asociación de Madres de Plaza de Mayo emitió un duro comunicado condenando el accionar de los jueces.
"Los jueces de la dictadura perdonaron a un genocida. Las Madres exigimos nuevos jueces para la democracia y cárcel para los jueces genocidas", sostuvieron.
