
En la imagen, parte de los haitianos que concurrieron a la academia policial.
PUERTO PRINCIPE.- Efectivos del Batallón Chile debieron esta mañana disolver una turba que se había abalanzado sobre las tropas francesas en Haití, ante una respuesta masiva a un llamado a integrar las fuerzas policiales, y en cuyos incidentes murió un civil y otras tres personas resultaron heridas.
Así lo consigna un comunicado del Ejército, emitido por el Departamento de RR.PP. del Comando de Operaciones Terrestres, que aclara que "el Cuartel General Multinacional dispuso la concurrencia de medios del Batallón Chile los que, después de actuar disuasivamente, regresaron a su acantonamiento sin registrar bajas ni haber provocado lesionados civiles".
Se explica que "acudiendo al llamado público para ingresar a la policía, un considerable número de personas, superior a las vacantes disponibles, concurrió en la mañana de hoy a la Academia de Policía Nacional en Puerto Príncipe".
"Tal hecho -añade- provocó la alteración del orden público, abalanzándose la multitud sobre las tropas francesas encargadas de la custodia de esa instalación, produciéndose, por razones que se investigan, una víctima fatal y tres heridos dentro de los postulantes".
Los incidentes
Las versiones de prensa señalan que la policía haitiana arrojó gases lacrimógenos y golpeó con porras a cientos de desempleados que el martes entraron a la academia de policía durante una campaña de reclutamiento en esta ciudad.
La infantería de Marina ayudó a la fuerza pública bloqueando la entrada con Humvees.
La policía concluyó rápidamente el proceso de reclutamiento, lo cual enfureció aún más a la multitud. Varias personas resultaron heridas en el incidente, según un gendarme francés que protegía la academia y que no quiso revelar su nombre.
El gobierno interino de Haití comenzó la campaña el lunes para reforzar la policía. Cientos de agentes, temerosos de ataques en represalia debido a su lealtad al ex presidente Jean-Bertrand Aristide, huyeron cuando los rebeldes iniciaron una rebelión armada que derrocó a Aristide el 29 de febrero.
El gobierno despidió a 150 de los antiguos agentes por abandonar sus puestos o por corrupción. Decenas más han huido del país.
"Nos empujaron para que saliéramos. La policía nos atacó", dijo Louis Hubert, de 29 años, un electricista y plomero que también trató de hacerse reclutar el lunes. "Hubo muchos disparos. También gases lacrimógenos, y nos golpearon con sus porras".