WASHINGTON.- Cinco parejas compiten para adoptar un niño dado a luz por una joven de 16 años en un programa de la cadena de televisión privada "ABC" que suscitó polémicas y protestas.
El "premio" fue ofrecido por una joven soltera, Jessica, que seleccionó personalmente, sobre la base de fotos y datos biográficos, a las cinco parejas "finalistas" de la transmisión.
El programa fue presentado por la célebre periodista Barbara Walters, que también es madre adoptiva, un hecho que alimentó aún más las controversias sobre el programa que será transmitido el viernes próximo con el título 'Be My Baby'.
El programa muestra a las cinco parejas seleccionadas muy nerviosas, sometidas a una "entrevista" de media hora con la casi adolescente Jessica, antes de decidir a quien asignará el bebé.
La situación presenta inquietantes paralelismos con la idea central del programa "reality" más popular del año, "The Apprentice", que acaba de concluir, con la participación del multimillonario Donald Trump que elige a través de un mecanismo de eliminación a un nuevo dirigente para su sociedad.
ABC, que llegó al cuarto y último puesto en los rating entre las cadenas televisivas de Estados Unidos, después de NBC, CBS y FOX, admitió que presentó la transmisión sobre la adopción del bebé de Jessica de manera equivocada.
Los cortos promocionales dieron la impresión de que 'Be my Baby' es un programa más del género "reality", con cinco parejas que compiten, mientras que en realidad es una encuesta sobre los mecanismos y sobre los aspectos humanos de las "adopciones abiertas", aclaró un vocero del canal televisivo de la Disney.
Se trata de adopciones en las que la madre y los futuros padres adoptivos entran en contacto, aclaró el vocero, admitiendo que la presentación del programa suscitó reacciones muy negativas.
La presentación del programa muestra a Jessica, con el niño recién nacido en brazos, que solloza mientras firma, sentada en la cama del hospital, el contrato de renuncia al bebé.
La ley de Ohio, el Estado donde se produjo el caso, consiente 72 horas de tiempo a la madre para que reflexione sobre la decisión, antes de darlo en adopción.
Durante todo el tiempo de la presentación, las cámaras hurgan despiadadamente en el rostro de Jessica en busca de señales de dudas o de remordimiento.
La periodista radiofónica Jane Braverman opinó que ABC "alcanzó sin lugar a dudas el punto más bajo de su existencia al especular sobre la adopción de niños para aumentar su audiencia".
También 'A Child’s Waiting', la agencia de adopción que colaboró con el programa manifestó indignación por la manera en que fue presentado el programa que habría tenido que servir para informar sobre las adopciones abiertas.