TILALI.- Unos cien pobladores que tienen capturados a cinco concejales de una comunidad de la zona del Lago Titicaca, tomaron como rehenes a dos policías, a fin de presionar para que se investigue al alcalde, que se fugó al ser acusado de corrupción.
Dante Vera, asesor del ministro del Interior Fernando Rospigliosi, negó el sábado en la tarde que hubiese policías cautivos y dijo que los cinco concejales habían planeado su toma como rehenes para atraer atención sobre las demandas de los locales. “Estamos en contacto permanente con la policía en Tilali y la situación está bajo control”, dijo Vera a la emisora Radioprogramas. “Niego que haya policías como rehenes”.
Pero imágenes captadas el viernes en este pueblo cercano a la frontera con Bolivia muestran manifestantes armados con palos y piedras mientras toman la estación policial. “Un centenar de pobladores llegó a la estación policial, bajo mi mando, y tomó como rehenes a los policías en vista de que no podemos usar las armas contra ellos”, dijo el comandante policial Carlos Taber por teléfono a la radioemisora Pachamama. “Por lo cual nos han tomado como rehenes”.
El capitán policial Herber Salinas dijo hoy por teléfono desde Puno, la capital regional, que 30 policías llegaron el viernes hasta las afueras de Tilali, cuyas vías de acceso han sido bloqueadas, pero decidieron no entrar en el pueblo a fin de evitar un enfrentamiento.
Una comisión de tres legisladores se dirigió el sábado por la mañana a Tilali a fin de dialogar con los pobladores levantiscos, dijo Salinas, agregando que la situación parecía estar en “calma”.
El jueves, los pobladores capturaron a cinco concejales en la oficina municipal de Tilali. Acusaron al alcalde Melecio Larico de malversar los fondos públicos y amenazaron con atacar a los cautivos si el gobierno no enviaba a una delegación para que escuche sus reclamos. “Exigimos que una comisión de alto nivel venga a Tilali lo más pronto posible”, dijo Eduardo Valli, uno de los líderes de la protesta. “Deseamos recobrar todo el dinero que Melecio Larico se ha llevado de nuestro pueblo”.
El levantamiento de Tilali se produce días después que los residentes de Ilave, un pueblo de la zona del Lago Tititcaca, a 910 kilómetros al sudeste de Lima, mataron el lunes al alcalde Cirilo Fernando Robles, después de acusarlo de corrupción.
La turba a continuación atacó la estación policial con bombas incendiarias y reclamaron la entrega de tres sospechosos que estaban detenidos.
Al día siguiente, fueron enviados 200 policías a fin de restablecer control en la zona. Al parecer el asesinato del alcalde de Ilavi, asustó a Larico, que abandonó Tilali y buscó refugio en la ciudad de Juliaca, dijo la policía.