LA PAZ.- Las Fuerzas Armadas bolivianas quedaron hoy viernes en situación de acuartelamiento permanente, en protesta por un fallo del Tribunal Constitucional que ordenó un nuevo juicio para cuatro militares acusados de dos asesinatos durante la represión a una protesta popular en febrero del año pasado.
El anuncio fue hecho en la tarde por el comandante de las Fuerzas Armadas, almirante Luis Aranda, en un encuentro con periodistas en el que no admitió preguntas. El militar se limitó a indicar que la situación se mantendrá hasta que se converse con el presidente Carlos Mesa, lo que debería ocurrir en las próximas horas.
El Tribunal Constitucional dejó sin efecto un fallo de la Corte de Justicia Militar que declaró inocentes a los cuatro militares y ordenó que éstos sean procesados por un tribunal civil.
Esa decisión fue celebrada por diversos sectores y funcionarios, como el Defensor del Pueblo, Waldo Albarracín, que la consideró trascendental en la lucha contra la impunidad.
Sin embargo, los militares rechazan el fallo, pues, según el presidente del tribunal castrense, vicealmirante Oscar Azcárraga, es un principio universal que una persona no puede ser juzgada dos veces por un mismo caso.
El gobierno se ha limitado a decir, a través del viceministro de Justicia, Carlos Alarcón, que está estudiando lo ocurrido.
Los militares fueron acusados de excederse en la represión y asesinar a dos personas durante las revueltas de febrero, que dejaron decenas de muertes y que fueron el antecedente de las de octubre, que derivaron en la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada.
Es la primera vez en mucho tiempo que los militares de autodeclaran en acuartelamiento.
