LONDRES.- El Primer Ministro británico, Tony Blair, calificó hoy la decapticación de un estadounidense secuestrado en Irak de "acto de auténtico barbarismo".
Para un acto de ese tipo no existe justificación alguna en el mundo civilizado, dijo el premier en Londres.
Previamente, un portavoz del Ministerio del Exterior había calificado la acción, que fue mostrada en un video colgado en una página web de extremistas islámicos, de "repugnante e inexcusable".
El antiguo arzobispo de Canterbury Lord Carey demandó que los líderes musulmanes de todo el mundo condenen el asesinato del ciudadano estadounidense Nick Berg. Carey había provocado recientemente una polémica al afirmar que los líderes islámicos no hacen lo suficiente para distanciarse de manera clara y contundente de los atentados suicidas.
En el video, dado a conocer el martes, un hombre encapuchado señala que los captores habían ofrecido intercambiar al rehén por algunos detenidos en Abu Ghoreib, pero que funcionarios de Estados Unidos se negaron.
"De modo que les decimos que la dignidad de los hombres y mujeres musulmanes en Abu Ghoreib y otros lugares no estará redimida, a menos que sea por sangre y almas", agrega el encapuchado. "Ustedes no recibirán de nosotros otra cosa que un ataúd detrás de otro ataúd, ejecutados de esta forma".
El estadounidense, un contratista, se identificó antes de morir como Nick Berg de Filadelfia, Pennsylvania. Posteriormente, mientras gritaba se le cortó la garganta con un cuchillo y luego sus captores mantuvieron la cabeza cortada en alto ante las cámaras.
El sitio web señala que Abu Musab al Zarqawi, segundo del líder de la red terrorista Al Qaida de Osama bin Laden, llevó a cabo el asesinato, aunque no hubo una confirmación independiente inmediata de esta información. Estados Unidos ofrece un recompensa de diez millones de dólares por la captura de Al Zarqawi.
