CARACAS.- El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, anunció hoy que su revolución bolivariana entrará en una etapa de lucha antiimperialista, al tiempo que llamó a la preparación de la organización popular para la defensa de la soberanía nacional.
A la vez, el mandatario informó que ordenó el fortalecimiento de todos los componentes de la Fuerza Armada, sin caer en una carrera armamentista, lo que permitirá aumentar las tropas activas.
En el acto de cierre de una marcha en protesta contra el paramilitarismo, una semana después de la detención de más de 100 presuntos paramilitares colombianos en las afueras de Caracas, Chávez anunció una serie de medidas para reforzar la defensa "integral" del territorio de la nación.
En el discurso ante miles de partidarios que repudiaron a los paramilitares colombianos y la injerencia estadounidense, el gobernante dijo que profundizará la unión cívico-militar que permita la defensa del país "en todos los rincones" y en la que cada ciudadano deberá ser un soldados.
"La revolución bolivariana, después de cinco años en el gobierno, después de pasar por varias etapas, ha entrado en una etapa antiimperialista, esta es una revolución antiimperialista, que nos llena de contenido especial y que nos obliga", señaló.
Chávez reiteró su denuncia de que los irregulares colombianos detenidos hace una semana tenían el propósito de asesinarlo, de degollarlo, para luego propiciar una intervención imperialista en Venezuela.
Agregó que las oligarquías de Colombia y Venezuela, con apoyo de grupos derechistas de Estados Unidos, planearon la "invasión" del país por un centenar de "asesinos y mercenarios".
"Si hubieran logrado asesinarme o si lo lograran en cualquier momento, aún cuando me horroriza la idea, estoy seguro que aunque lograran mi eliminación física, esa fórmula tampoco les hubiera funcionado porque si Chávez hubiera sido asesinado, si estos asesinos pretendieran imponer un gobierno impuesto por el imperialismo norteamericano, estoy seguro que desde mi tumba oiría el tremolar de un pueblo que va defender esta tierra", dijo.
Chávez destacó que el Consejo de Defensa de la Nación, que fue convocado tras la detención de los irregulares, deberá tomar una serie de medidas para defender la soberanía nacional, entre ellos crear un comando militar en el centro del país.
Al definir la línea estratégica que propone dentro de la fase antiimperialista de su gobierno, señaló que como primer paso ordenó el fortalecimiento del sector militar, incrementando el contingente armado que permita una "mayor capacidad operativa y de movilización".
Al respecto, dijo que destinará el equivalente a 10,4 millones de dólares para equipar y entrenar a las tropas, además de reparar equipos militares.
"Lo he dicho: el Hugo Chávez de 2002 quedó parta la historia y no voy a dejarme acorralar por nada ni por nadie. Estamos listos para enfrentar cualquier amenaza. No nos van a sorprender", aseveró.
Otro aspecto que mencionó es seguir fortaleciendo la unión cívico-militar, dentro de la cual pidió a los jefe de guarniciones que "no tengan contemplación con nadie" a la hora de expulsar a los "traidores".
Además, recalcó que ordenó el cierre de las oficinas de enlaces militares con agregados estadounidense que estaban en la principal instalación castrense de Caracas, el Fuerte Tiuna.
"Ya era hora que esa misión norteamericana saliera. Ahí vamos a hacer una escuela. Esos son espacios de soberanía que no se pueden a abrir ningún espacio internacional, menos norteamericano", dijo.
Igualmente, Chávez lanzó el concepto de defensa nacional integral para la cual llamó al pueblo a incorporarse a la defensa nacional, abriendo el espacio para la "participación popular masiva".
"Se trata de incorporar al pueblo masivamente a la defensa integral del territorio nacional y para ellos cada ciudadano debe considerarse un soldado", dijo y agregó que militares retirados cooperaran en el entrenamiento de estas milicias populares.
Durante el día, varios miles de personas recorrieron decenas de kilómetros desde el este de la ciudad para concentrarse en la histórica avenida Bolívar, en el centro de Caracas, a fin de mostrar su apoyo a las denuncias del gobierno sobre una "invasión" de paramilitares en el país.