ORADOUR-SUR-GLANE.- El Papa Juan Pablo II hizo hoy un llamado para que no se olvide quiénes fueron los responsables de la masacre en la localidad francesa de Oradour, perpetrada por tropas alemanas durante la Segunda Guerra Mundial.
En un mensaje enviado con motivo del 60° aniversario de la masacre y leído por el arzobispo de Limoges, Christophe Dufour, el Sumo Pontífice también pidió que en el recuerdo de la matanza "se construya una sociedad de la paz y de la fraternidad en la que la gente pueda darse la mano y reconciliarse".
Soldados de las tropas de élite SS mataron en Oradour a 642 personas el 10 de junio de 1944, es decir, cuatro días después del desembarco de las fuerzas aliadas en Normandía. Sólo cinco hombres y una mujer del pueblo, en el suroeste de Francia, sobrevivieron.
Bajo el pretexto de buscar armas escondidas y como represalia contra la resistencia francesa, la división acorazada de las SS "Das Reich" concentró a todos los habitantes de Oradour en el centro del pueblo y luego mató a tiros a los hombres. Las mujeres y los niños fueron encerrados en la iglesia, que fue incendiada por los soldados.
