CARACAS.- El Presidente venezolano, Hugo Chávez, dijo hoy que el referendo revocatorio de su mandato, que se celebrará el 15 de agosto próximo, será un enfrentamiento electoral entre él y el Presidente de Estados Unidos, George W. Bush.
"Nuestro verdadero contendor (rival) es el Gobierno de Washington y eso lo vamos a personalizar en el referendo (...), donde estaremos enfrentados Hugo Chávez y George W. Bush; ahí está en verdad el enfrentamiento, entre el que quiere adueñarse de este país y yo, que estoy dispuesto a lo que sea por defender a esta tierra", dijo.
En un discurso en la inauguración de una planta procesadora de tomates en su pueblo natal, Barinas, estado de Sabaneta, Chávez repitió que en esa consulta no enfrentará "a ninguno de estos dirigencillos de la oposición venezolana".
"En verdad, modestia aparte, ninguno tiene el peso para enfrentarse a mí en una batalla de igual a igual. Será Chávez o Bush, y el pueblo venezolano escogerá entre una patria verdadera o permitir que nos roben la patria, y estoy seguro cuál va a ser el resultado".
Insistió en que ninguno de los dirigentes de la oposición nacional tiene su "estatura moral", y admitió que estatura "intelectual pudieran tener, (porque) algunos son doctores y han estudiado más que yo".
Eso "no importa, yo he estudiado (...), sobre todo de este pueblo; esta es mi universidad", dijo.
Agregó que "con mucha humildad, aunque no lo aparezca", podía asegurar que no tenía "contendor político en Venezuela".
Bush, agregó Chávez, ganó las elecciones en su país "con trampa", y en el referendo venezolano está "pensando cómo hacer trampa y nosotros cómo evitarla".
El Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano decidió hace cuatro días que el referendo contra Chávez será el 15 de agosto, tras validar el número de firmas suficientes para ello.
Si el gobernante lo pierde, deberán celebrarse elecciones presidenciales adelantadas, durante los 30 días posteriores al referendo.
Chávez pronosticó que sus detractores no podrán igualar los 3,7 millones de votos necesarios para abortar su mandato, y que son los que le dieron la victoria en las elecciones presidenciales de julio de 2000.