BRUSELAS.- Los partidos de centro-derecha se alzaron con la victoria en las elecciones parlamentarias de la Unión Europea, al llevarse entre 247 y 277 escaños de los 732 que tiene el Parlamento Europeo, según cálculos preliminares de la UE.
Las elecciones en los 25 países del bloque contaron un récord mínimo de votantes, del 44,2%. Entre los 10 nuevos miembros, el porcentaje fue del 28,7.
El grupo socialista, compuesto por legisladores del Partido Laborista inglés del Primer Ministro Tony Blair y el Social Demócrata alemán del Canciller Gerhard Schroeder, fueron segundos, y se preveía que obtuvieran entre 189 y 209 curules.
No obstante, tanto el partido de Schroeder como el del Presidente francés Jacques Chirac sufrieron una dura reprimenda por parte de sus electores.
La UE pronosticó que el tercer grupo más importante del PE iba a ser el de los Liberales Demócratas, de 54 a 70 escaños.
Los Verdes iban a mantener el cuarto lugar, haciéndose con un número de 39 a 49 escaños. Los partidos de tendencia izquierdista y el grupo comunista iban a apropiarse de 30 a 40 asientos para quedar como la quinta agrupación más importante.
El partido euro escéptico EDD, del legislador danés Jens-Peter Bonde, tenía previsto obtener entre 16 y 22 asientos.
Grupos independientes se llevaron varios escaños, incluyendo el movimiento antieuropeo Partido Independencia.
Se desconoce si los partidos independientes conformarán un grupo.
El líder liberal demócrata, Graham Watson, se mostró decepcionado por el auge de los partidos antieuropeos y por la escasa presencia de votantes.
Las elecciones "reflejan que hemos fracasado en hacerles llegar el mensaje a los electores de qué tan importante es la UE", dijo. "Necesitamos a la UE para afrontar retos que ningún estado pueda enfrentar por sí solo", agregó.
Desde Suecia hasta Eslovaquia, los europeos de 19 países votaron el domingo para elegir a sus representantes en el Parlamento Europeo, poniendo fin a la primera elección del bloque desde que fue ampliado en mayo.
Otros seis países, entre ellos Gran Bretaña, ya habían emitido sus sufragios en los comicios de cuatro días que muchos electores utilizaron para manifestar su apoyo o rechazo a las políticas implementadas por los gobiernos nacionales.
Los temas que se debatieron durante las campañas eran, sin embargo, europeos: desde el desempeño continental en Irak hasta las dificultades del bloque para negociar una constitución.
Otro asunto importante era la apuesta de Turquía, cuya población es predominantemente musulmana, de unirse al grupo de 25 naciones que integran la Unión Europea.
La elección fue la primera para los 10 nuevos países de la UE, que incluyen a ex naciones comunistas como Polonia y Hungría.