MOSCÚ.- El Centro de Control de Vuelos Espaciales (CCVE) de Rusia informó hoy de que todo está listo para una caminata espacial en la noche del jueves, indispensable para reparar equipos vitales en la Estación Espacial Internacional (ISS).
El portavoz del CCVE, Víctor Blágov, explicó que el cosmonauta ruso Guennadi Pádalka y su colega estadounidense Michael Fincke ya han concluido todas las labores previas y es muy probable que no sea necesario postergar la maniobra por 24 horas, como se anunció ayer.
"Pádalka y Fincke, tras casi seis horas de trabajo, han concluido los trabajos para adecuar los trajes espaciales Orlán-M" y ensayar el funcionamientos de sus sistemas, afirmó Blágov.
Esta salida espacial, que no estaba prevista en el programa de vuelo de la actual novena expedición, se realiza para reparar un giroscopio que dejó de funcionar el pasado mes de abril debido a un fallo en uno de los circuitos de alimentación eléctrica.
La caja que contiene ese circuito se encuentra fuera de la ISS.
El giroscopio es un equipo indispensable para establecer la orientación de la ISS en el espacio.
Los cosmonautas, que se rigen en la ISS por la hora GMT, pasaron el pasado martes a un régimen nocturno de vida para adaptarse mejor a la caminata, que comenzará a las 22:00 GMT.
Inicialmente, esta salida se debía haber realizado con trajes espaciales norteamericanos, pero los cosmonautas no pudieron reparar un desperfecto en uno de ellos y la NASA estadounidense decidió usar las escafandras rusas Orlán-M.
El giroscopio averiado está adosado al módulo estadounidense Unity de la ISS, de ahí la conveniencia de que los cosmonautas salieran desde la escotilla de este segmento con trajes de la NASA.
Además del aspecto negativo que supone la falta de un tercer tripulante a bordo, que pudiera coordinar las labores desde el interior de la estación, esta caminata espacial es una experiencia nueva con cierto margen de riesgo para los dos astronautas.
En esta ocasión, Pádalka y Fincke saldrán desde el módulo ruso Pirs y deberán recorrer en el espacio abierto 24 metros en lugar de los nueve que tendrían que avanzar desde el segmento estadounidense.
Durante la caminata, los cosmonautas estarán asesorados simultáneamente por expertos del CCVE en la ciudad de Korolióv, a las afueras de Moscú, y del centro estadounidense en Houston.
Expertos en ambos centros estudiaron diferentes variantes para adecuar los trajes espaciales rusos con las herramientas norteamericanas que emplearán los cosmonautas en las reparaciones.
Tanto los expertos de Korolióv y Houston como los cosmonautas deberán observar rigurosamente el orden establecido para suministrar y recibir las instrucciones e información correspondientes al curso de los trabajos.
Actualmente, la orientación de la ISS depende del funcionamiento de dos de los cuatro giroscopios adosados en el modulo estadounidense de la plataforma orbital.
Otro de los giroscopios dejó de funcionar hace dos años y no se podrá reemplazar hasta que se reanuden los vuelos de los transbordadores estadounidenses a la ISS, suspendidos tras la catástrofe de la nave Columbia en febrero de 2003.
Los giroscopios no pueden ser transportados en las naves de carga rusas Progress porque, por su forma y tamaño, no entran por las escotillas de estos aparatos.
Si Pádalka y Fincke no consiguen reparar el giroscopio, los dos aparatos restantes son de momento suficientes para estabilizar la posición de la ISS.
Pero si falla un tercer giroscopio, la ISS deberá emplear sus propios propulsores y los de las naves Progress para mantenerse estable, lo que significa un gasto adicional del preciado combustible almacenado a bordo del ingenio espacial.
