BAGDAD.- Un automóvil bomba estalló cerca de instalaciones de la policía y el gobierno en la ciudad occidental de Haditha el jueves, dejando 10 muertos y 27 heridos, dijeron las autoridades, en el más reciente de una serie de atentados contra las autoridades iraquíes por parte de militantes.
La policía al parecer impidió un segundo atentado en Karbala, donde un segundo automóvil bomba explotó a cinco kilómetros al oeste de Karbala, dejando dos muertos en el vehículo, dijo Rahman Mshawi, vocero de la policía local.
La policía persiguió el automóvil luego de recibir un informe de que estaba lleno de explosivos.
La violencia ocurre un día después de que un atacante suicida activara un potente automóvil bomba que le costó la vida al menos a 10 personas, así como lesiones a 40 más, en el peor incidente en su tipo en Bagdad desde que Estados Unidos entregó la soberanía nacional a un gobierno interino el 28 de junio.
El ataque en Haditha, bastión del derrocado régimen de Saddam Hussein, a 200 kilómetros al oeste de la capital, parece haber sido contra la estación de policía principal, dijo el coronel Adnan Abdel-Rahman, vocero del Ministerio del Interior de Irak. Tres policías se cuentan entre los muertos, indicó.
Policías y funcionarios públicos suelen ser blanco de rebeldes, quienes los consideran lacayos de las fuerzas norteamericanas.
La violencia que ha asolado al país desde la caída del régimen de Saddam Hussein hace 15 meses continúa a pesar de que las fuerzas norteamericanas han entregado la autoridad nacional a un gobierno interino.
El miércoles, un automóvil lleno con 450 kilogramos de explosivos estalló en un retén en las afueras de la llamada Zona Verde, donde se encontraban los cuarteles de la fuerza de ocupación encabezada por Estados Unidos y se asienta actualmente el gobierno interino iraquí y las embajadas de Washington y Londres.
La detonación causó la muerte de 10 personas, muchas de las cuales esperaban para solicitar empleos con el gobierno, dijo el Ministerio de Salud. El ejército norteamericano indicó que fueron 11 los muertos.
La explosión dejó un profundo cráter en el camino, con cinco automóviles convertidos en esqueletos ennegrecidos, además de destruir parcialmente un muro diseñado para proteger la zona contra detonaciones.
Horas después, rebeldes lanzaron granadas de mano y dispararon ametralladoras contra el convoy del gobernador de Ninivé, Osama Yusef Kashmula, causando su muerte y la de dos de sus guardaespaldas. Mosul es la ciudad más grande de la provincia de Ninivé.
Kashmula fue atacado entre las ciudades de Beiji y Tikrit, en el norte de Bagdad, mientras viajaba hacia la capital, dijo el ejército norteamericano. Cuatro de sus atacantes murieron en el combate, dijeron fuentes en Mosul.
