SIDNEY.- El primer ministro iraquí, Iyad Allawi, fue acusado de haber asesinado a seis presuntos guerrilleros en una estación de policía de Bagdad en junio, denunció el diario australiano Sydney Morning Herald.
El gobierno interino de Irak desmintió rápidamente la denuncia, aunque el diario citó a dos personas que dicen haber sido testigos de las ejecuciones.
Según los testimonios, los prisioneros, maniatados, estaban alineados contra un muro hasta que Allawi les dijo que habían matado a 50 personas personas y que "merecían algo peor que la muerte".
La oficina de Allawi en Bagdad informó que el premier nunca visitó un centro de detención y ni siquiera tuvo una pistola.
Los informantes del diario señalaron que Allawi disparó a la cabeza de siete prisioneros, uno de los cuales sobrevivió, ante el silencio de cuatro soldados estadounidenses y una decena de policías iraquíes.
El diario australiano difundió el nombre de tres de las presuntas víctimas de Allawi. Los denunciantes dicen haber estado a cuatro metros de las ejecuciones.
"Allawi quería lanzar un mensaje a sus policías y soldados animándolos a no tener miedo de usar los más fuertes métodos", dijo uno de los denunciantes.