MOSCÚ.— Los restos de la hermana de la última zarina fueron devueltos a Rusia este domingo en la más reciente señal de solidaridad entre la dominante Iglesia Ortodoxa de Rusia y su filial en el extranjero, que se separó después de la revolución bolchevique.
Los restos de la Gran Duquesa Isabel, que fue arrojada por el socavón de una mina por los bolcheviques en 1918 y que fue canonizada tanto por la iglesia de Moscú y la Iglesia Ortodoxa Rusa en el exterior, fue trasladada por avión procedente de Jerusalén.
Los restos de Isabel, la hermana mayor de la esposa del zar Nicolás, Alexandra, habían sido trasladados a China y a la catedral de María Magdalena en Jerusalén.
Las reliquias —parte de la mano derecha de Isabel, según el canal de televisión Rossiya— fueron trasladadas en una arca dorada hasta la catedral de Cristo Salvador de Moscú para una ceremonia. Permanecerán durante seis meses en Rusia y será trasladadas a otras iglesias de la ex Unión Soviética.
También fueron devueltos los restos de la ayudante de Isabel, una monja de nombre Varvara, que fue asesinada con ella.