CIUDAD DE GUATEMALA.- La policía de Guatemala arrestó el miércoles en un hospital al ex vicepresidente Francisco Reyes López, dos días después de que no compareció a una audiencia en la corte para responder a cargos por corrupción.
Reyes es el funcionario de mayor nivel del gobierno del mandatario anterior, Alfonso Portillo, que es arrestado desde que el presidente actual, Oscar Berger, asumió el cargo en enero, ofreciendo combatir la corrupción política.
Fiscales afirman que Reyes trató de defraudar al Estado con terrenos valorados en 2.800 millones de dólares.
"Tratan de denigrarme con el hecho de dictar una orden de captura que saben que no tiene ningún fundamento legal", dijo Reyes a los periodistas poco antes de ser arrestado.
Ciudadanos encendieron fuegos artificiales y festejaron, mientras policías que portaban armas automáticas colocaban a Reyes en un automóvil.
Se esperaba que Reyes compareciera el lunes ante una corte, pero se internó en un hospital privado, propiedad de Mario Bolaños, quien fue ministro de Salud durante la gestión del ex presidente Portillo.
Después de arduas negociaciones realizadas la noche del martes, un especialista determinó que una enfermedad por la que Reyes se internó no era razón suficiente que le librara de la cárcel.
El arresto de Reyes es el más reciente en una serie de detenciones de ex funcionarios ordenada por el gobierno conservador de Berger.
"Están tomando una venganza porque... quitamos enormes privilegios, evitamos el alza de la canasta básica... y aumentamos las salarios mínimos, y eso no se perdona porque ellos creen que son los dueños de Guatemala", dijo Reyes.
Portillo, quien se cree vive actualmente en México, está bajo investigación en Guatemala y Estados Unidos por su presunta participación en el robo y lavado de decenas de millones de dólares.
