WASHIGTOn/MANNHEIM.- Un sargento estadounidense acusado en relación al escándalo por el maltrato a prisioneros en la cárcel de Abu Ghraib, Irak, se declarará culpable de los cargos por abusos, adelantó a última hora del lunes el periódico "Washington Post" en su edición online.
"He aceptado la responsabilidad por mis acciones en la prisión de Abu Ghraib", indica una declaración firmada por el sargento Ivan Frederick. "Me declararé culpable de ciertos cargos porque he concluido que lo que hice fue una violación de la ley", agrega.
Asimismo, señala que espera que otros militares que participaron en "el caos que fue Abu Ghraib avancen y acepten sus responsabilidades’’.
Frederick es uno de los siete soldados acusados en relación a este escándalo. Según el cronograma previsto, mañana deberá presentarse ante una corte militar estadounidense en la base norteamericana de Mannheim, Alemania.
En ese lugar comenzó hoy bajo estrictas medidas de seguridad el interrogatorio de dos días a testigos e implicados en este caso.
El acusado principal, el sargento Charles Graner, quien mantuvo silencio hasta ahora, declaró sobre su detención, pero no ofreció ningún detalle referente a las acusaciones.
La defensa de los soldados acusados, todos integrantes de la policía militar de Estados Unidos, pero especialmente los de Graner, están empeñados en destacar los fallos de procedimiento en todo lo relativo a la confiscación de computadoras que contenían fotografías de los hechos y los interrogatorios llevados a cabo por efectivos de los servicios secretos.
El objetivo es prolongar en lo posible todo lo relativo a la presentación de evidencias y retrasar al máximo el inicio del proceso. Se estima que todas las gestiones previas podrían durar aún varios meses.
Las fotos de los abusos contra los presos en Abu Ghraib, publicadas en abril pasado, levantaron una ola de indignación en todo el mundo.
La audiencia que tiene lugar en Mannheim es un caso único, según comunicó el juez que tiene a su cargo la causa, coronel James Pohl, ya que el resto de las audiencias y el proceso será celebrado en Bagdad. Los abogados de los acusados habían pedido que por cuestiones de seguridad y costos el proceso tenga lugar fuera de la insegura capital iraquí.
Guy Womack, abogado civil de Graner, ya anunció que en la próxima audiencia, a celebrarse en Bagdad el 21 de octubre, solicitará de nuevo que tanto las audiencias indagatorias como el proceso se celebren en Estados Unidos o Alemania.
Los interrogatorios que tienen lugar en Mannheim se llevan a cabo de acuerdo al derecho estadounidense y tienen el objetivo de comprobar si las evindencias alcanzan para iniciar un proceso ante un tribunal militar.
En una de las imágenes publicadas en abril se ve a Graner posando de forma triunfalista ante una pirámide de presos desnudos. En otra foto también aparece la cabo primero Lynndie England, compañera sentimental de Graner, quien aparece llevando a un preso desnudo con una correa como si fuera un perro.
La mayoría de los soldados acusados dijeron que los servicios secretos los habían alentado a estas acciones.
Uno de los acusados, el cabo Jeremy Sivits, ya se declaró culpable en las audiencias previas y entre tanto fue condenado por un tribunal militar a un año de carcel y expulsión del ejército.