EMOLTV

Rebelde iraquí, Al-Sadr, ordena retirada de sus tropas de Nayaf

Al-Sadr emitió la orden en un comunicado a su milicia Ejército Majdi, el cual fue transmitido por medio de altavoces colocados en el venerado santuario del Imam Alí.

27 de Agosto de 2004 | 07:47 | AP
NAYAF, Irak.- El religioso radical chiíta Muktada al-Sadr le ordenó a sus tropas el dejar las armas y salir de la ciudad de Nayaf y la vecina Kufa luego de aceptar un acuerdo de paz mediado por el principal dirigente chiíta del país, para ponerle fin a tres semanas de combates.

Al-Sadr emitió la orden en un comunicado a su milicia Ejército Majdi, el cual fue transmitido por medio de altavoces colocados en el venerado santuario del Imam Alí, usado por militante como fortaleza y refugio durante sus enfrentamientos con una fuerza combinada iraquí-estadounidense.

"A todos mis hermanos en el Ejército del Majdi... ustedes deben de abandonar Kufa y Nayaf sin sus armas, junto con las masas pacíficas", dice la declaración.

Decenas de militantes cumplieron con la orden, apilando sus fusiles Kalashnikov ante la oficina de al-Sadr. Miles de milicianos de al-Sadr continuarían, sin embargo, en posesión de sus armas en la ciudad.

Al-Sadr aceptó el ofrecimiento de paz durante un encuentro la noche del jueves con el gran ayatola Ali Jusseini al-Sistani, de 75 años. El gobierno interino de Irak también aceptó el plan y las fuerzas norteamericanas ordenaron el cese al fuego.

Previamente el viernes, miles de personas marcharon por las calles de Nayaf y luego se dirigieron al santuario, uno de los más sagrados para los chiítas. Los milicianos habían sacado sus armas de ahí la semana pasada, pero continuaban refugiados en el edificio.

En los caminos que llevan al lugar sagrado, la policía dispuso retenes para revisar a los manifestantes en busca de armas, mientras la gente se tomaba de las manos y la alzaba al aire, cantando loas a Dios. Muchos de ellos besaron las puertas del recinto al entrar en él.

Los soldados estadounidenses se mantuvieron a la expectativa mientras la gente caminaba hacia el edificio. El teniente primero Chris Kent dijo que el acuerdo de paz "parece ser una solución definitiva. Eso es lo que parece ser ahora".

Sin embargo, la policía enfrentó a tiros en algún momentos a militantes, mientras que los soldados estadounidenses continúan bajo fuego de francotiradores ocasionalmente. Sin embargo, los fieros combates de las últimas semanas terminaron y las calles están en calma.