NUEVA YORK-. El ex Presidente Bill Clinton se recupera satisfactoriamente y respira con normalidad tras ser sometido a una operación de cuádruple desvío coronario justo a tiempo de evitar un ataque cardíaco.
El ex Jefe de Estado, de 58 años, fue desconectado el lunes por la noche del respirador artificial, una medida crucial en su recuperación, dijo el martes el cirujano Bob Kelly, uno de los que operó a Clinton.
"Todo marcha muy bien", aclaró el facultativo a la cadena de televisión NBC.
Clinton fue sometido el lunes, durante cuatro horas, a una operación de cuádruple desvío coronario en el neoyorquino Presbyterian Hospital/Columbia. Su oclusión arterial era extensa y en algunos casos el lumen arterial estaba cerrado en un 90%, según los médicos.
"Existía un riesgo sustancial de que hubiese sufrido un extenso ataque cardíaco", explicó el doctor Allan Schwartz, jefe de cardiología del centro. Los médicos consideraron un éxito la operación de Clinton y anunciaron que podrá reanudar su vida normal dentro de unas semanas.
El ex Mandatario sufría además de hipertensión y quizás no fue tratado debidamente por su elevado colesterol. Los médicos dijeron que hace unos días se le recetaron medicamentos anticolesterol. Ese tratamiento le fue indicado en el 2001 cuando dejó la Casa Blanca.
"Estos últimos días han sido para nosotros una montaña rusa emocional", dijo la mujer de Clinton, la senadora Hillary Rodham Clinton, en una declaración. "El optimismo y fe del presidente le sostendrán durante las difíciles semanas y meses que se avecinan, no nos queda la menor duda".
Clinton acudió al hospital a fines de la semana pasada tras quejarse de dolores en el pecho e insuficiencia respiratoria, pero los médicos afirmaron que padecía estos síntomas desde hace varios meses. Agregaron que los atribuyó a la falta de ejercicio y a un reflejo gástrico.