ATENAS.- En Grecia comenzó hoy un duelo nacional de tres días por la muerte del jefe de la Iglesia greco-ortodoxa de África, el patriarca de Alejandría Petros VII.
En el centro de Atenas, cientos de personas se despidieron del cuerpo del patriarca, informó la televisión estatal griega. En todos los edificios públicos, las banderas ondeaban a media asta.
El patriarca Petros VII murió junto a otras 16 personas el sábado al estrellarse el helicóptero en que viajaba ante la costa griega, delante de la península de Chalkidiki, en el norte del país. La mayoría de las víctimas eran religiosos.
Petros VII, oriundo de Chipre, era desde 1997 papa y patriarca de Alejandría y toda África, donde viven unos 250 mil cristianos ortodoxos.
Dado que debido a un mal entendido sobre la ruta de vuelo se inició la búsqueda del helicóptero dos horas después del accidente, el Primer Ministro griego, Kostas Karamanlis, despidió al jefe de la fuerza aérea, general Panagiotis Papanikolaou.
También el ministro de Defensa, Spilios Spiliotopoulos, ofreció su renuncia, pero no le fue aceptada.