CIUDAD DEL VATICANO.- El papa Juan Pablo II expresó hoy su preocupación por la paz en el mundo debido "al crecimiento de las acciones de grupos extremistas, que cada vez obstaculizan más los caminos del diálogo y las negociaciones".
El Pontífice también volvió a denunciar el "gigantesco abismo" que separa a los países ricos de los países pobres", en detrimento de los derechos humanos.
Juan Pablo II hizo estas manifestaciones en el discurso que dirigió al nuevo embajador de Portugal ante la Santa Sede, Joao Alberto Bacelar Da Rocha Páris, que hoy le presentó sus cartas credenciales.
"Es por todos conocidos el panorama socio-político mundial desde el inicio de este milenio: la acentuación de las diferencias regionales tanto culturales como económicas y la preocupación por la salvaguardia de la paz frente a las acciones de grupos extremistas, que cada vez obstaculizan el camino del diálogo y de las negociaciones", afirmó el Obispo de Roma en su discurso, escrito en portugués.
Papa Wojtyla incluyó entre sus preocupaciones las catástrofes naturales y las enfermedades endémicas, así como el "gigantesco abismo entre ricos y pobres, en detrimento de los derechos humanos" debido al proceso de globalización.
Refiriéndose a Portugal, el Obispo de Roma resaltó las raíces cristianas de esa nación y agradeció al Gobierno de Lisboa el apoyo prestado para lograr -aunque al final no se consiguió- que la nueva Constitución Europea reconociera las raíces cristianas del viejo continente.
