BAGDAD.— Un atacante suicida activó un auto bomba ante un establecimiento de fotocopiado en el oeste de bagdad, donde varios solicitantes de ingreso a la Guardia Nacional de Irak preparaban sus papeles antes de ir a un cercano centro de reclutamiento.
Las autoridades informaron que el atentado dejó un saldo de al menos seis muertos y 54 heridos.
Cadáveres ensangrentados, cristales rotos y escombros cubrieron las calles en el vecindario comercial de Al-Yamiyá.
Al menos 13 vehículos resultaron dañados y el motor del empleado en el ataque fue lanzado a unos 50 metros de distancia.
"Un hombre en un Opel de color negro se acercó al establecimiento y detonó los explosivos", dijo el policía Ajmed Yassem.
Ali Yabbar, dueño de una tienda cercana, ayudó a los empleados de ayuda a recoger restos humanos y ponerlos en bolsas de plástico. "Encontré esto en la parte posterior de mi camión, dijo al mostrar fragmentos de materia cerebral.
La policía de Irak y los soldados estadounidenses acordonaron la zona de inmediato.
Un funcionario del Ministerio del Interior, Adnan Abdul-Rajman, dijo que la detonación fue causada por un conductor suicida.
Los rebeldes han atacado en varias ocasiones a la policía y la guardia nacional de Irak con bombas, morteros y armas de fuego, en un intento por sembrar la inestabilidad e interferir en los esfuerzos estadounidenses por crear una fuerza de seguridad eficiente para Irak. Cientos de personas han muerto en los ataques.