FREEPORT, Bahamas.- Cientos de personas abandonaron sus hogares y se refugiaron en los albergues instalados en escuelas e iglesias, mientras el huracán Jeanne se aproximaba el sábado a las Bahamas, con vientos intensos y lluvias torrenciales.
El fenómeno, que genera vientos de 160 kilómetros por hora (100 mph), amenazaba con causar más destrucción a un archipiélago que apenas se recupera de los daños ocasionados por el huracán Frances.
Unas 700 personas desalojadas se aglomeraron en una escuela dentro de la población de Marsh Harbor, mientras los vientos exteriores y las lluvias de Jeanne comenzaban a azotar la isla Abaco, la mañana del sábado. El huracán pasaría directamente sobre Abaco y se fortalecería antes de llegar a la costa sudoriental de la Florida.
El viernes, la gente formó largas filas en las gasolineras y acudió masivamente a las tiendas para comprar alimentos y agua. Otros instalaban a toda prisa tablones de madera sobre las ventanas de su vivienda, ante los pronósticos de que Jeanne pasaría sobre el noroeste de las Bahamas el sábado y avanzaría a la Florida.
Algunos residentes más colocaban remiendos sobre los huecos dejados por Frances en los techos de las casas.
"Tememos que dos de nuestras islas sean azotadas duramente, Abaco y Gran Bahama", dijo Jeffrey Simmons, del servicio meteorológico de las Bahamas.
Las autoridades instaron a la gente para que desaloje las casas ubicadas en zonas bajas, y abrieron refugios en Abaco, Eleuthera y Gran Bahama, donde se ubica Freeport, la segunda ciudad más grande de la nación.
Los meteorólogos señalan que Jeanne podría ocasionar un aumento de 2,5 metros (8 pies) en el nivel normal de la marea.
Jeanne rondaba las Bahamas tres semanas después de que el archipiélago fue afectado por Frances, que mató a dos personas y causó daños en miles de viviendas.
